Realizarán reapertura del Teatro Julio Jiménez Rueda

CIUDAD DE MÉXICO.

A 20 meses de que las autoridades culturales de la administración pasada dieran por perdido el Teatro Julio Jiménez Rueda, debido a las afectaciones provocadas por los sismos de 2017, y a casi un año de que el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y el Instituto de Seguridad y Servicios de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) firmaran un convenio para su futura reconstrucción, Lucina Jiménez, actual directora del INBA, lo reabrirá antes de septiembre.

Así lo anunciaron ayer integrantes del sindicato INBAL/ATM —que obtuvo de la autoridad 3.3 millones pesos por pagos sindicales en 2018 (Excélsior 15/05(2019)—, quienes afirmaron que la funcionaria “ya visitó todos los rincones del viejo teatro y decidió reabrirlo con una gran fiesta que incluirá una gran apertura y una fiesta con la comunidad teatral”, debido a que no registra daño estructural alguno.

El recinto, ubicado en Plaza de la República 154, “cumplirá 54 años y se mantiene cerrado bajo el argumento de que estaba dañado por los sismos de 1985 y 2017. “Sin embargo, tenemos los dictámenes respectivos de que el inmueble no tiene absolutamente nada”, dijo ayer Rubén Darío Bermúdez en una rueda de prensa.

Adelantó que Lucina Jiménez lleva avanzadas las pláticas con los representantes del ISSSTE, “porque se dieron cuenta de que el inmueble no tiene absolutamente nada, sino que los daños son en el edificio aledaño, así que no queremos que se cierre un centro de trabajo que tiene tantos años en el colectivo cultural de la Ciudad de México”, apuntó en entrevista.

Insistió que desde 2015 “se había firmado el acta de defunción” de este espacio emblemático para las artes escénicas, luego de que medios de comunicación reportaran que la venta de los dos predios alcanzaría los 950 millones de pesos, ante lo cual la Secretaría de la Función Pública invalidó la posible transacción.

Nos enteramos de que la autoridad (del sexenio pasado) decidió desalojarlo y que tenían toda la intención de vender los terrenos para edificar un centro comercial”, lo cual no se concretó tras la intervención de la SFP y la firma de un convenio que adelantaba su posterior demolición y reconstrucción.

La decisión de Lucina Jiménez para retomar la actividad en el foro fue con base en una visita que hizo al teatro y de un dictamen con fecha 1 de octubre de 2017, obtenido por Excélsior.

En éste se aclara que “toda vez que se ha hecho de las condiciones de estabilidad estructural y de sus instalaciones y que de acuerdo con el Reglamento de Construcciones para el DF y a sus normas técnicas complementarias no presenta daño alguno que pueda poner en riesgo la integridad de sus ocupantes, así como cualquier persona que ingrese al inmueble, por lo que el referido inmueble puede ser ocupado, ya que su condición de seguridad es Habitable sin riesgo”.

El documento se divide en dos: una forma de inspección postsísmica de evaluación rápida y un dictamen de seguridad gratuito, ambos elaborados por el Ing. Arq. José Manuel Díaz Espino.

Sin embargo, el documento tiene dos indicaciones: una revisión física posterior y una evaluación detallada debido a que uno de los espacios del teatro (el edificio aledaño) registra una inclinación notoria.

Hasta hoy el INBA no ha informado la fecha oficial para reabrir el teatro Jiménez Rueda, que en su fachada conserva mantas de protesta.

RECONSTRUCCIÓN

Cabe recordar que en julio de 2018 el INBA y el ISSSTE firmaron un convenio para garantizar la construcción de un nuevo Teatro Julio Jiménez Rueda, “debido a los daños que sufrió por los sismos de los últimos años”, pero ubicado en el número 140 de Avenida de la República.

Según el documento, “desde marzo de 2012 las instalaciones del teatro fueron afectadas, así como las anteriores oficinas centrales de la dependencia (en el 140 de la mencionada calle)”.

Y se acordó que mientras se concluyera la construcción de las nuevas instalaciones y, en acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el INBA utilizaría el Teatro Isabela Corona para realizar las actividades que se llevaban a cabo en el primer inmueble, cuya vigencia será hasta que se finalicen las obras.

Excélsior buscó a algún trabajador o técnico que laborara en dicho recinto. Sin embargo, se confirmó que desde hace más de un año los trabajadores fueron reubicados a otros teatros.

En tanto, la comunidad teatral plantea preguntas a Lucina Jiménez: ¿qué pasará con el convenio entre INBA e ISSSTE?, ¿el INBA continuará utilizando el Isabela Corona?, ¿el INBA cuenta con el dictamen del edificio contiguo que aparentemente pone en riesgo la integridad del foro?, ¿la funcionaria ya cuenta con un diagnóstico sobre el mantenimiento a su mecánica teatral? y ¿con cuánto presupuesto cuenta para realizarlo?

La historia del recinto se resumiría así: en febrero de 1961 se publicó un decreto presidencial para que el ISSSTE construyera sus oficinas centrales en el predio ubicado en Av. de la República 154. También se ordenó al ISSSTE adaptar una sala de espectáculos que se destinaría al servicio de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Luego, en septiembre de 1965, la SEP y el ISSSTE suscribieron un contrato por medio del cual se hizo entrega la sala de espectáculos denominada Teatro Julio Jiménez Rueda para ser administrada por el INBA con el fin de que fuera destinada al fomento de actividades propias de ese Instituto. Desde entonces ha operado regularmente y ha dado cabida a espectáculos como Amantes del Teatro y los ciclos escénicos de la Escuela Nacional de Arte Teatral.

cva