Mitologías y seres de Yampolsky; inauguran exposición en el Centro de la Imagen

CIUDAD DE MÉXICO.  Cerca de 200 fotografías, litografías, objetos de arte popular y documentos conforman la exposición Mariana Yampolsky entre cuerpos extraños, que ayer se inauguró en el Centro de la Imagen, en el marco de su 20 aniversario luctuoso.

La muestra, que permanecerá hasta el 21 de agosto, es una amplia retrospectiva del trabajo de la fotógrafa y grabadora de origen estadunidense, quien mantuvo una relación artística con figuras como Frida Kahlo, Leopoldo Méndez, Pablo O’Higgins, Alfredo Zalce, Manuel Rodríguez Lozano y Ramón Alva de la Canal.

El punto de partida es una reflexión sobre el papel del cuerpo en la vida social, a partir de las fotografías y grabados de Mariana, así como de reflexiones en las ciencias sociales en el sentido del cuerpo como linde de interacción entre personas, objetos, edificaciones, arquitectura, ritua-les y tradiciones”, comentó a Excélsior la curadora de la exposición, Eugenia Macías.

Su fotografía, abundó, también permite apreciar distintos paisajes, gestos en familia, vida afectiva, vida ritual, procesos de trabajo, ejercicio de oficios, los futuros posibles de las infancias, metáforas visuales y, al mismo tiempo, apreciar la continuidad que guarda su trabajo con fotógrafos modernistas como Lola y Manuel Álvarez Bravo o Tina Modotti.

La muestra, que también incluye litografías realizadas por Yampolsky durante su estancia en el Taller de Gráfica Popular (TGP), “lo que nos permite es hacer un diálogo de su obra gráfica con la fotográfica a partir de los distintos ejes temáticos”, apuntó.

Así que gozaremos de apreciar algunas de sus obras de ese periodo, acompañadas del material de archivo que hace referencia a su trabajo como curadora, por ejemplo, los documentos relacionados con una exposición que curó en torno a los 150 años de la fotografía en México y otra por los 30 años del TGP, ambas en el Museo de Arte Moderno.

Además, aseguró que la exhibición contiene dos tipos de materiales fotográficos: la obra más conocida de Mariana, y la otra parte (cerca de 45 fotografías), que es la menos conocida y que forma parte de distintos proyectos creativos que llevó a cabo en Tlacotalpan, como su proyecto sobre arquitectura vernácula, en áreas rurales y en haciendas, apuntó Macías, quien es profesora e investigadora de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía del Instituto Nacional de Antropología e Historia (ENCRyM). Finalmente, explicó que Yampolsky combinó su amor por el campo, su atención en las poblaciones rurales e indígenas, así como en la empatía y cercanía con las personas que plasmó en su fotografía.

cva

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