Jóvenes son víctimas de robo en sede de vacunación anticovid

CIUDAD DE MÉXICO.- Dos jóvenes fueron víctimas de robo en la sede de vacunación contra covid-19 instalada en la Biblioteca Vasconcelos.

Los hechos ocurrieron el sábado 10 de julio cuando Mariana acudió a ponerse la vacuna contra covid-19 y a su acompañante Carlos la esperaba en una jardinera.

Un hombre con un gafete con logotipo del ISSSTE entraba y salía frente a él.

En la entrada de cristal donde están las policías fue que me dijo que el acceso era restringido y que no podía pasar con mis cosas ni con las de Charly, porque a la zona a la que íbamos a entrar estaban las vacunas. Agarré mi cangurera me dijo que la metiera en la mochila, él se la dio a la oficial”, asegura Mariana.

Él comienza a decir que necesitaba ayuda para mover unas cajas y quien se pudiera unir”, explicó Carlos.

Mariana ya estaba por salir y Carlos ya había entrado a la Biblioteca acompañado del hombre que se identificó con el nombre de Fernando.

Le dijo que le comentara a Mariana si quería participar también y ella aceptó.

 Yo me quedé con su mochila y estaba esperando a este señor y de momento sale, me dice que no era posible sacar las cajas que entonces tenía yo que entrar”, narró Mariana.

Ya con los amigos separados y Mariana cargando todas las cosas le dijo que tenía que encargarlas con la policía de la entrada, él mismo se las entregó y Mariana vio cómo la uniformada las recibió, las metió a la Biblioteca y luego desapareció.

Después de esperar un rato, Mariana volvió a la puerta por sus cosas.

Estaba muy alterada y se acercaba gente de las brigadas y se los empecé a describir, pero nadie lo conocía”.

Mientras adentro, Carlos también buscaba razón del hombre que supuestamente lo había contratado y por lo que le respondió un policía supone que no es la primera vez que lo hace.

De inmediato me responde, no pues yo creo que ya se llevaron tus cosas”.

Por esta razón los jóvenes consideran que los policías están coludidos con este hombre o al menos lo protegen.

Los policías insistían en afirmar que era nuestra culpa, pero nosotros insistíamos en que no mentíamos y tenía que salir en las cámaras y en ese momento nos empiezan a rodear muchos elementos como amedrentarnos para no ir al MP a levantar el acta”, contó Carlos.

Incluso los policías les propusieron que se arreglaran con la policía que señalan de haberle recibido las mochilas.

Decepcionados por la actitud de los policías fueron a levantar una denuncia a la espera de que les muestren las cámaras de seguridad, pues hay una justo en la puerta donde sucedieron los hechos, y así sea identificado el sujeto que los engañó.

Es una persona de aproximadamente 1.60 de altura, como entre 40 a 45 años, tez morena clara, un poco cacarizo de la cara, frente amplia, se peina con mucho gel y cabello parado y trae un porta gafete color guinda del ISSSTE", detalló Mariana. 

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