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Morena, el partido más importante del mundo

Ricardo Peralta Saucedo

Ricardo Peralta Saucedo

México correcto, no corrupto

Enorme aspiración, sobre todo cuando el legado tiene como principal precedente a un actor sumamente carismático, un Presidente impulsado por todo un movimiento nacional de más de 30 millones de electores que llevó al licenciado Andrés Manuel López Obrador a ser un icono mundial en la historia reciente de la época contemporánea, por la contundencia de su triunfo.

En los últimos días han hecho públicas sus aspiraciones  a presidir Morena actores como el experimentadísimo diputado Porfirio Muñoz Ledo, un hombre respetado y querido en la política nacional, ha militado en diversos partidos y ocupado carteras en diversos gobiernos, tanto del PAN como del PRI y del PRD; el joven e inteligente politólogo Gibrán Ramírez Reyes, quien se ha destacado participando en programas de opinión política defendiendo su visión morenista y hasta hace poco servidor público. También el arquitecto y diputado Javier Hidalgo, quien apenas hace unas horas mostró su intención.

Seguramente la lista se incrementará en los próximos días; la convocatoria de Morena para la sucesión, que debió realizarse hace meses, fue avalada por el INE; la resolución judicial emitida por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación tuvo que imponerse ante el desacato y desinterés del presidente interino, que solamente tenía esa facultad y desaprovechó la oportunidad histórica. ¿Sabrá que ya no es de oposición?

Ahora, y en cumplimiento a la determinación judicial, se acatará con la participación de la militancia y simpatizantes. Es una resolución no impugnable legalmente. El tiempo se agotó ociosamente.

Ésos más de 30 millones de electores, entre los que me encuentro, tendremos la posibilidad de participar, como militantes o simpatizantes. La democracia entre más amplia y libre es más legítima, como lo expresé ante los miembros de la Asociación Nacional de Legisladores de la 4T. Invitado por otro de los aspirantes, el actual líder de la Cámara de Diputados y actual coordinador del grupo parlamentario de Morena.

El diputado federal Mario Delgado Carrillo tiene una larga trayectoria política. Fue senador de la República, ha sido secretario de Finanzas y de Educación del gobierno de la Ciudad de México, ha participado activa y eficientemente en las campañas del licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Su liderazgo ha hecho posibles las reformas legislativas para fortalecer el marco jurídico propuesto desde campaña por el presidente López Obrador; como la ampliación del catálogo de delitos en materia de corrupción para considerarlos de prisión preventiva oficiosa, la eliminación del fuero, la garantía constitucional para las becas a jóvenes y adultos mayores, entre muchas más que hoy son la gran plataforma de la Cuarta Transformación de México.

Morena es el partido más importante del mundo por ser un movimiento vivo de decenas de millones de simpatizantes a nivel nacional, que ha dado la mayor muestra de movilización social, política y económica que arrancó de raíz a un régimen corrupto que fue disminuido casi a la extinción; algunos todavía se manifiestan en automóviles.

Mario Delgado Carrillo tiene la fortaleza, como lo ha hecho en la Cámara de Diputados, para sumar a los simpatizantes que no coinciden con los radicalismos que históricamente han dañado a la izquierda mexicana.

Es momento de refrescar con actores virtuosos y llenos de energía a la dirigencia partidista. El reto no sólo son las importantísimas elecciones de 2021, las de 22, 23 y las federales de 2024. La Cuarta Transformación tiene visión nacional, debe fortalecer sus bases con unidad y madurez.

Es momento de evitar protagonismos, los tiempos no dan para experimentos de prueba-error. Las decisiones deben ser contundentes por lo que se avecina o se corre el riesgo de abrir un boquete de vacío político para los adversarios.

Lo deseable es encontrar la coyuntura para sumar liderazgos, todos son valiosos, pero lo serán más emancipados. La patria es primero.

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