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Amor propio V. El entorno sociocultural

Paola Domínguez Boullosa

Paola Domínguez Boullosa

La coach

 

 

La vida tiene su lado sombrío y su lado brillante;
                de nosotros depende elegir el que más nos plazca.

Samuel Smiles

 

Según el siquiatra Enrique Rojas, una clave más para determinar un buen nivel de amor propio o autoestima es el entorno sociocultural, el cual señala y hace referencia al ámbito social en el que se desarrollan los propios recursos de relación interpersonal. Tener relaciones saludables es indicativo de un nivel positivo de autoestima o amor propio.

Sociocultural, es todo aquello que se refiere al estado o las cosas culturales de un grupo o de una sociedad, las cuales forman parte intrínseca de la educación, la formación, el aprendizaje y la evolución de una persona. Todos hemos sido influidos, hasta el día de hoy, por el momento histórico en el que nacimos, por nuestro núcleo familiar, amigos, parejas, compañeros de trabajo o de iniciativas.

Cabe señalar que el hecho de haber sido influidos no quiere decir, obligatoriamente, que esos factores hayan de determinarnos. Es importante conocer estos aspectos de quienes nos rodean para entender mejor su proceder, pero nunca hay que olvidar que la libertad siempre ha de estar presente y esa libertad nos permitirá elegir con mayor o menor facilidad, con qué aspectos sociales y culturales nos identificamos y hacemos nuestros y cuáles no aceptamos.

Desde mi punto de vista, ahí radica la importancia del entorno sociocultural. Ligado con el amor propio o la autoestima. Pero… no importa el dónde, el cómo, el por qué, el para qué o el quién nos lo haya dicho o hayamos vivido o creído o qué es o qué era o qué sería lo correcto. Lo correcto para nuestra vida siempre será únicamente lo que nosotros mismos decidamos. Ningún abanico de opciones que nos presente nuestra vida puede competir con nuestra elección y decisión.

Indudable que repercute, genera una enorme paz mental, el saber que podemos elegir y que nuestra historia o lugar o núcleo de referencia no determina, obligatoriamente, quiénes somos ni mucho menos nos condena. Uno siempre puede elegir quién quiere y cómo quiere ser y vivir su vida, y eso es de las mejores oportunidades que la vida nos ofrece todos los días para ser felices. Por eso, hoy le invito a reflexionar sobre su poder de elección, porque solamente usted sabe cómo vive y cómo desea vivir su vida, que nada le detenga, recuerde siempre que lo que ha vivido a lo largo de su historia sólo son puntos de referencia, pero nunca determinaciones absolutas.

Créame, el amor propio nace ahí, cuando poseemos la confianza y la seguridad para tomar decisiones y elegir lo que mejor conviene a nuestra vida, y eso sólo lo sabe cada uno de nosotros. El monosílabo no es la primera palabra que aprendemos y, con el tiempo, se nos olvida el poder que tiene para permitirnos estar donde queremos estar y cómo queremos hacerlo.

No importa cómo haya sido su vida hasta hoy, importa que aprenda a decir no a todo aquello que le haga daño, a las personas tóxicas que le rodean, a las malas relaciones, a los entornos que no le satisfacen, a las conductas y comportamientos que no tiene por qué tolerar, e incluso a sus malas experiencias, pensamientos, razonamientos o sentimientos. Libérese y vuelva a elegir las veces que sea necesario hasta que viva satisfecho y feliz.

Nada le determina, nada le condena, nadie puede obligarle a vivir de una manera que usted no quiere, los cambios nunca son fáciles, pero, créame, vale más una renuncia a tiempo que una vida llena de insatisfacciones. Así que levante la mirada y vea el horizonte y lo que tiene por ofrecerle, porque para decir no, no importa su historia ni sus errores ni sus creencias fallidas ni sus decepciones. Sólo importa quién es usted y lo que está dispuesto a hacer por esa felicidad que merece. Y lo que crea merecer también depende de ese amor propio en el que siempre debemos trabajar. Como siempre, usted elige.

¡Felices entornos, felices vidas!

 

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