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Agenda 2030, un compromiso global con impacto local

London eye

London eye

Por Corin Robertson

Durante muchas décadas de la historia de la humanidad creímos que la generación de riqueza era la solución mágica para combatir la pobreza y que ella podía generarse a partir de la explotación desmedida de los recursos naturales. Al final, la Tierra es tan vasta, ¿qué podría salir mal?

Henos aquí, años después, enfrentando una pandemia que nos está azotando globalmente, pero que no nos ha afectado a todos por igual. El covid-19 vino a hacer aún más notorias las profundas e injustas desigualdades que siguen existiendo en nuestras sociedades.

Lo hemos visto en cosas tan simples como la forma en la que uno se protege del virus: los más afortunados nos quedamos en casa, haciendo home office, nos cubrimos al salir y recordamos lavar nuestras manos varias veces al día mientras cantamos happy birthday en nuestra mente (que dura más o menos los 20 segundos que debe durar el lavado). Mientras tanto, allá afuera hay mucha gente que tiene que salir y exponerse al contagio para asegurarse un sustento diario y que no puede estar lavando sus manos porque carece de acceso al agua limpia. Muchos otros miles no pueden quedarse en casa porque no tienen un hogar.

Vivimos en un mundo lleno de desigualdades que se profundizan cada minuto. Si queremos asegurar la prosperidad para todas y todos debemos hacerlo de tal forma que no ponga en riesgo la sostenibilidad de nuestro planeta, no comprometa los recursos para las futuras generaciones y asegure nuestra estabilidad social y política. Se dice fácil, pero es probablemente la ecuación más compleja que se haya intentado resolver.

La Agenda 2030 busca llenar esta ecuación como una hoja de ruta compuesta por 17 objetivos que persiguen el desarrollo sostenible, para que nunca más permitamos un crecimiento sin desarrollo y para que nunca más dejemos a nadie atrás.

La implementación de la Agenda 2030 en México es un esfuerzo que atañe a todas las dependencias del gobierno. La mejor demostración de la relevancia que tiene la misma es que la oficina a cargo de su seguimiento y directriz está establecida directamente en la oficina del Presidente.

Como parte de nuestros diálogos bilaterales, Reino Unido mantiene una estrecha colaboración con dicha oficina, tan estrecha que decidimos aventurarnos juntos a explorar un nuevo modelo de colaboración: las adscripciones. A través de nuestro programa UK PACT, con este modelo apoyaremos a la oficina de la Presidencia con dos personas que se encargarán de hacer investigación y análisis sobre las oportunidades de financiamiento sustentable que existen para México.

Encontrar las oportunidades de inversión verde en México a través de mecanismos tradicionales e innovadores de financiamiento público, privado y fondos internacionales es el primer paso fundamental que se debe tomar para el camino a un desarrollo sostenible, justo y resiliente. Estoy convencida de que colaborando juntos internacionalmente siempre podemos dar esos pasos con mayor impacto y alcance.

La semana pasada me reuní con Alfonso Romo (jefe de la oficina) y Gemma Santana (directora de la Agenda 2030), de la Oficina de la Presidencia del gobierno de México, para formalizar esta colaboración y acordar nuevas formas de fortalecer nuestra relación bilateral. Además, esta semana estaremos participando en la Sesión Ordinaria del Consejo Nacional de la Agenda 2030, presidida por el canciller Ebrard. Celebramos el constante esfuerzo de México por avanzar en los Objetivos de la Agenda 2030, hoy más que nunca, no debemos dejar a nadie atrás.

Como cada lunes, espero sus comentarios a través del correo london.eye@fcdo.gov.uk o a través de Twitter,
en @CorinRobertson y @ukinmexico.

*Embajadora de Reino Unido en México.

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