Susana Zabaleta, como nunca

Va a ser el sábado a las 21:00 horas, en mi programa El minuto que cambió mi destino. La invitada de lujo será ni más ni menos que Susana Zabaleta, una mujer echada para adelante, que igual canta que actúa o conduce, y todo lo hace con un alto registro profesional. Bueno, pues esta monclovense estará el sábado y sí, fue un deleite entrevistarla. Es una señora a quien he entrevistado muchas veces y no existe nadie con quien me haya peleado más que con ella. Recuerdo que una vez, cuando era conductor de un programa de Televisa que se llamaba Con todo, suena mi celular en el corte comercial y era ella y me dice, textual: “Hola, sólo te hablo para decirte que lo pendejo también se pega, salte de ese programa, pero ya, antes de que sea demasiado tarde”, ja ja ja ja, ese es el carácter de Susana.

Esta charla la venía buscando desde hace años, y no estoy exagerando, pues las cosas no habían estado muy bien entre nosotros, la había criticado por sus comentarios y, por supuesto, ella no andaba muy contenta que digamos. Fueron meses de negociaciones con su manager, Rossy Pérez, aunque tengo que confesar que nunca me puso condiciones para la entrevista, nunca, tampoco me pidió que no tocara algún tema en especial. Pero sí tuvimos que cuadrar las fechas y los horarios.

Y llegó con su cabello largo, un vestido rojo muy pegado, sensual, llamativo y, sin pelos en la lengua; habló de todo, de las veces que la han acosado en este negocio —incluso me dijo: “¿y a quién no la han acosado?”—, de su llegada a México, de la primera diferencia que tuvo con El Señor Teatro, Manolo Fábregas, quien, al verla, le dijo, “a ver, date una vuelta”, y ahí ardió Troya. También relata cómo conoció a Daniel Gruener, el padre de su hija, y el dolor que le causó su separación y el divorcio, ya que ella no quería separarse. Quizá la parte más emotiva de esta conversación es cuando nos relata cómo adopta a su hijo menor; es una historia que no se pueden perder. En sí, la entrevista completa es una conversación imperdible, la van a disfrutar muchísimo.

¿Les confieso algo?, Susana Zabaleta es una mujer que cae bien, cae bien por lo fuerte y controversial que es, pero también llena de ternura (aunque no le guste demostrarlo) y belleza. Gracias, Zabaleta.