Logo de Excélsior                                                        

El aspirante rebelde

Francisco Garfias

Francisco Garfias

Arsenal


La lucha anticipada por la sucesión presidencial está en marcha, impulsada —paradójicamente— desde Palacio Nacional, aun cuando la elección será en el 2024.
Sin el menor rubor se promueve abiertamente a Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la CDMX. El Presidente le alza el brazo, la lleva a giras, la apapacha, la placea, la deja hacer. Es su carta fuerte y ella lo sabe.

Se trata de una “sucesión desenfrenada” que, de manera inusitada y “alejado de toda ortodoxia política”, abrió hace cinco meses el propio presidente López Obrador, como bien apunta el senador Ricardo Monreal en un atrevido artículo que publica en el diario El País.

El zacatecano, hombre acostumbrado a remar contra la corriente, advierte que, si no existen reglas claras y prevalecen los “favoritismos” en el proceso interno, el desencuentro político será inevitable. Sostiene que el nivel de aceptación que tiene AMLO, superior a 65% de la población, hace presumir que la candidata o candidato que él impulse será quien lo suceda.

“Sólo una ruptura entre aspirantes de Morena puede poner en riesgo el triunfo en el 2024”, advierte el zacatecano, sabedor de que cualquier aspirante que camine sin el cobijo presidencial “marcha cuesta arriba.”

López Obrador dice que el método más conveniente para elegir al candidato presidencial son las encuestas. El senador repite en todos los foros la necesidad de elecciones internas. Sabe que las mediciones son un dedazo disfrazado. No olvida la encuesta patito que lo dejó fuera de la disputa por la Jefatura de Gobierno en 2018. Leí y releí el artículo. Me pregunté si Monreal no está rompiendo lanzas. No se necesita un sesudo análisis para imaginar la reacción de López Obrador, poco acostumbrado a la crítica: irritación.

* Tirar la toalla es una expresión que se utiliza en el box. El árbitro de una pelea está obligado a detenerla si los asistentes de uno de los contendientes lanza al cuadrilátero una toalla en señal de rendición. Si trasladamos esta expresión a la arena política, Marko Cortés, jefe nacional del PAN, tiró la toalla en el round electoral 2022. Da por perdidas cinco de las seis elecciones de gobernador que se llevarán a cabo el año que entra.

“No hay más. Está muy complicado Durango, Tamaulipas, Quintana Roo, Hidalgo y Oaxaca. La única en que tenemos realmente posibilidades buenas y contundentes es Aguascalientes”, dice Cortés ante líderes del PAN, de acuerdo a un audio filtrado que circula en redes sociales.

La reacción más contundente ante la derrota anticipada que vaticina Cortés vino de su propio partido. El exgobernador de Querétaro, Pancho Domínguez, se le fue a la yugular:
“Hay más personas con nosotros que contra nosotros. Acción Nacional debe sacudirse la mediocridad. Es el momento de una diálisis para darle talento, valentía y nueva vida”, escribió en Twitter.

Jesús Zambrano, aliado perredista de Marko Cortés, rechaza la derrota anticipada. “Los tres dirigentes del PRD, PAN y PRI hemos visto las particularidades de cada estado, el grado de dificultad que se tiene para poder lograr triunfos, pero al mismo tiempo, de ninguna manera damos por perdido ningún estado”, le dijo a Reforma.

* Hace 16 meses, Emilio Lozoya fue extraditado de España. No ha pisado la cárcel a pesar de que está confeso de haber recibido sobornos de Odebrecht.
Se acogió a la figura de “criterio de oportunidad” —algo así como testigo protegido— a cambio de dar “información eficaz” sobre superiores jerárquicos y legisladores involucrados en moches repartidos por la empresa brasileña.

La audiencia en la que presuntamente aportaría información sobre otras 17 personas involucradas en el escándalo Odebrecht deberá celebrarse este miércoles.

La defensa de Lozoya pidió una nueva prórroga —la sexta— para presentar las pruebas que dice tener. Un juez resolvió que el exdirector de Pemex comparezca físicamente en la audiencia que resolverá si le otorgan los 60 días de prórroga que solicita para la traducción de documentos sobre Odebrecht, enviados de Alemania y Brasil.

Entre esas 17 personas están los expresidentes Peña, Calderón y Salinas; el exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray; los excandidatos presidenciales Ricardo Anaya, PAN, y José Antonio Meade, PRI.

Pero también los entonces legisladores de Acción Nacional Ernesto Cordero, Francisco Domínguez, Francisco García Cabeza de Vaca, Salvador Vega, Jorge Luis Lavalle, este último ya en prisión. Otros señalados son el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, el único de Morena en la lista, el priista David Penchyna, el exgobernador Javier Duarte, el empresario Juan Armando Hinojosa, el exdirector de Pemex, Carlos Treviño, y la periodista Lourdes Mendoza.

Comparte en Redes Sociales