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Suple fuerza federal a policía local…

Enrique Aranda

Enrique Aranda

De naturaleza política

Al margen el incuestionable logro que para la Fiscalía General, Sedena y Marina representó la detención, ayer —“en operativos espejo”, podría decirse— de líderes de las principales fuerzas responsables del incontrolado entorno de inseguridad que se vive en la capital, lo cierto es que tales acciones evidenciaron la incapacidad e ineficiencia de las instancias responsables de preservar la paz social en la Ciudad de México y su zona conurbada.

El hecho de que agentes federales, acompañados por elementos del Ejército, detuvieran a Jorge Flores Conchas (a) El Tortas, presunto dirigente de la denominada Fuerza Anti-Unión, en Tlalpan, y que, con diferencia de horas, miembros también de la Fiscalía, acompañados éstos por marinos, hicieran lo propio con Pedro Ramírez Pérez (a) El Jamón, en Atizapán de Zaragoza, pero sin participación alguna de personal de las áreas de seguridad del gobierno de Claudia Sheinbaum, es prueba irrefutable de que las instancias locales están desbordadas por el crimen organizado… desde el régimen anterior, sí, pero también y de manera mucho más notable ahora.

O más, la afirmación de autoridades vinculadas con las exitosas acciones respecto a que “la procuradora (Ernestina) Godoy Ramos sólo fue enterada hasta que ambas habían concluido…” es por demás reveladora de la aquí denunciada —“CDMX: desborda la violencia…” del 12/V/19— falta de expertise —“experiencia en el hacer, experiencia en la aplicación de algo…”, explicaría alguno— existente en la oficina de aquélla, para no hablar de lo que ocurre en el área de Jesús Orta Martínez, jefe de la policía capitalina.

Qué bien, pues, que dos de los personajes a quien hoy las autoridades federales de seguridad atribuyen el explosivo crecimiento de la violencia en la capital como resultado del —“aún hoy negado”— asentamiento de los cárteles del crimen organizado vía su vinculación con grupos locales o con elementos propios, estén ahora ante la justicia; ello, sin embargo, no debe cancelar la reiterada demanda social y exigencia a las instancias responsables de optimizar el quehacer y operatividad de las fuerzas locales del orden, y la coordinación de éstas con las corporaciones federales, para tratar de abatir, ya, los escandalosos índices de violencia prevalecientes.

Insistamos…

 

ASTERISCOS

* La sorpresiva aprehensión, por cierto, del presidente de Altos Hornos de México, Alonso Ancira, en Palma de Mallorca, España, constituye, a decir de quienes saben, un primer paso hacia la captura del ahora amparado Emilio Lozoya Austin y —“en su momento, cuando sea oportuno…”— de otros involucrados en el sonado caso Odebrecht.

* Luego de un largo proceso, el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que lidera Arturo Zaldívar, resolvió a favor del gobierno de Sonora el recurso por el que la gobernadora Claudia Pavlovich mantiene la facultad de proponer al Congreso a los tres miembros del Instituto Sonorense de Transparencia. Bien…

* Benévola, sin duda, la forma —“expresión minoritaria…”, les dice— que el líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Alfonso Cepeda, utiliza para referirse a los vándalos de la impresentable CNTE, al margen de que lo haga para referir la reunión de aquéllos con el Ejecutivo.

Veámonos el viernes con otro asunto De naturaleza política.

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