A las mujeres de Morena

Carlos Monsiváis: “() las mujeres () significan poquísimo en lo político y lo social y prácticamente nada si se les sitúa frente a la deidad de esos años: la Historia (con mayúscula), territorio exclusivamente masculino. Según la doctrina patriarcal ni el poder ni la violencia ni la valentía indudable ni la lucidez histórica son asunto de féminas”. 

http://dcsh.xoc.uam.mx›repdig›item›download.unfantasmarecorreelsiglo-luchasfeministasenméxico 

Parece que no hemos cambiado mucho. Las mujeres, a pesar de la paridad, seguimos “significando poquísimo en lo político”, basta reflexionar en el caso de Susana Harp. 

A un mes de un aniversario más del grave suceso ocurrido en México en 1913, la decena trágica, recordemos el innegable apoyo que las mujeres de todas las clases sociales dieron al presidente Madero. Primero, hicieron posible su triunfo en las elecciones de 1911. Para ello, formaron los Clubes feministas antirreeleccionistas, analizando y difundiendo su inconformidad con el régimen de Porfirio Díaz. Trabajaron incansablemente para persuadir a quien prestara oídos y no se arredraron ante amenazas, que no sólo venían del gobierno, sino en muchas ocasiones, de su propios familiares. Juana Belén Gutiérrez anima la voluntad de participar, diciendo “con más firmeza que nunca” las mujeres debemos levantar la voz.

• Una vez ganada la elección, muchas se decepcionaron. La misma Juana publica una carta dirigida al presidente Madero: “Esto es sencillamente abominable y no se nota la ausencia de don Porfirio Díaz. De suerte que, en los momentos en que lea usted esta carta, habrá llegado ya al puesto para cuya conquista contribuimos, y nosotros, los que hemos gastado todos nuestros elementos y toda nuestra existencia por conquistar la libertad, no podemos disfrutar ni de la libertad material, lo cual no deja de hacernos reír un poco. Le ruego a usted, que si le es posible, se sirva decirme qué puedo esperar de usted en este asunto”.

https://www.omnibus.com/n36/sites.google.com/site/omnibusrevistaintercul...

Eso de que ni “la valentía… son asunto de fémina”, cae por su propio peso al recordar a María Hernández Zarco, quien fue la única persona decidida a apoyar a Belisario Domínguez imprimiendo y difundiendo su último discurso. Ella dijo: “Malo hubiera sido que presentándoseme la oportunidad de servir a la patria, no hubiera contribuido con mi granito de arena, cuando México estaba atravesando por tan triste situación, en aquellos días de tragedia, de luto y de indignidades del usurpador Victoriano Huerta. Hago notar que estoy orgullosa de pertenecer al gremio de las artes gráficas, porque este gremio, ha actuado en revolución política y social mexicana, con verdadero afán y entusiasmo”. 

https://mujeresyrevolucion.wordpress.com/2017/05/30/maria-hernandez-zarco/

• Y sobre la “lucidez histórica” de las mujeres, Dolores Jiménez y Muro, fundadora del Club Femenil Antirreeleccionista Hijas de Cuauhtémoc, a quien se le reconoce la autoría del Plan Político y Social, en el que “se aboga por el voto libre y la no reelección; además, se establecen buen número de principios en beneficio de los indios. Una vez más se habla del aumento de jornales, del día de ocho horas, de la dignificación del obrero, de la devolución de tierras a sus antiguos propietarios, del reparto de tierras para que sean trabajadas, y la abolición de los monopolios”.

https://es.wikipedia.org/wiki/Dolores_Jiménez_y_Muro

Una sugerencia para las integrantes de Morena: aprender de la vida y la lucha de esas mujeres. Callar quizás sea más fácil, pero es evidencia, primero, de miedo y después, de cobardía. ¿Traicionar principios? hablar con la verdad ¿sería sincericidio, en ese partido tan moralmente superior?