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Compras de pánico sobre declinaciones

Adrián Rueda

Adrián Rueda

Capital político

Compras de pánico se registraron ayer en la CDMX, como último recurso para tratar de darle la vuelta a los números que arrojan las encuestas en ciertas alcaldías, donde la pelea está al rojo vivo. Como la lucha se cerró más de lo esperado, Morena sacó la chequera en Álvaro Obregón y Cuajimalpa, por ejemplo, para que los candidatos de Fuerza por México y Verde Ecologista, de repente se dieran cuenta de que toda la campaña estuvieron del lado equivocado.

Si bien es cierto que ambos partidos son aliados de la 4-T y votar por ellos es lo mismo que votar por el actual gobierno, cada uno quiere tener sus propios canicas, sobre todo los tucanes, para poder negociar en 2024 con quien crean más conveniente. En el caso de Fuerza por México, su candidata Leslie Staines declinó ayer durante su cierre de campaña por el moreno Eduardo Santillán, por considerarlo “la mejor opción” para encabezar la alcaldía; algo que no pensaba cuando aceptó la candidatura del partido rosa. Y está bien, cada quien es libre de pensar lo que se le venga en gana y de cambiar de opinión, pero al menos debió avisar a sus jefes antes de anunciar que se pasaría con el enemigo. El anuncio cayó de sorpresa al presidente del partido en Álvaro Obregón, Carlos Jiménez, quien  de inmediato desconoció la decisión de su hoy excandidata, lo que le resta valor a la compra morenista.

Y es que quien ha construido la poca estructura rosa en ese territorio es el hijo del fallecido político Manuel Jiménez Guzmán, que tiene el control de los liderazgos, por lo que, a pesar de lo aparatoso del anuncio de la declinación, Santillán sólo se lleva el cascarón. Leslie no tiene base social ni posibilidad de ofrecer cargo alguno a quienes quisieran seguirla, pues en caso de ganar, con trabajos habría espacio para los propios grupos de Morena que confluyen en esa demarcación.

El joven Jiménez tiene que hacer un rápido control de daños y ver hacia dónde inclina su capital político luego de esta traición. Otro dirigente capitalino que está que echa chispas es el verde Jesús Sesma, pues su candidato en Cuajimalpa, Miguel Ángel Sarabia, anunció también ayer su declinación por Francisco Saldívar, aspirante de Morena en Cuajimalpa.

El hoy excandidato verde fue otro de los que de repente comprendió que estaba luchando en el lado equivocado y decidió brincar de partido, sólo que tampoco se le ocurrió consultar con sus jefes. De inmediato Sesma procedió al control de daños y llamó a la militancia de esa zona a no hacer caso al llamado del voto útil en favor de Saldívar, pues dijo que sería lo peor que le podría pasar a Cuajimalpa. Y ahí sí se metió en en un pequeño embrollo, pues se supone que PVEM y Morena van de la mano, aunque ya se vio que no tanto.

Estos movimientos son importantes para los morenos que buscan hacerse del importante corredor del occidente de la capital. Por eso las compras de pánico.

CENTAVITOS Donde hubo otra declinación en favor de Morena fue en Guerrero. Manuel Negrete decidió dejar Fuerza por México y subirse al camión con Evelyn Salgado. Parece que el exfutbolista es muy indeciso, primero aceptó ser alcalde de Coyoacán por el PRD; luego abandonó el cargo para buscar la gubernatura por los rosas y tampoco acabó. Hoy se va con Morena, donde planeará seguir con sus negocios en caso de ganar. Parece que no estuvo tan mal para los coyoacanenses que Negrete se haya ido antes.

 

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