Luchan por su vida 11 tortugas rescatadas de marea roja en Oaxaca

OAXACA

El Centro Mexicano de la Tortuga atiende a 10 ejemplares de la especie Prieta y una de la especie Golfina que resultaron afectadas por el fenómeno de marea roja en el estado de Oaxaca, que a finales de 2019 provocó la muerte de 293 tortugas.

En un comunicado de prensa, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) recordó que a partir del pasado 26 de diciembre, prestadores de servicios turísticos de San Agustinillo y Mazunte comenzaron a observar tortugas marinas a la deriva en el litoral y reportaron los hallazgos.

De los ejemplares recibidos, se logró medicar a 22, sin embargo, hubo decesos debido a que venían muy débiles, por lo que actualmente se encuentran en recuperación 11 tortugas (10 prietas y una golfina) de las cuales se mantiene un diagnóstico reservado", informó.

La Conanp destacó que de las necropsias realizadas a los ejemplares muertos, se encontró que el intestino y el estómago estaban saturados de salpas y con las paredes de los órganos sumamente dañados.

Las salpas son organismos de cuerpo gelatinoso y casi transparente (con frecuencia confundidos con medusas) que son movidos por las corrientes marinas; son filtradores y generalmente inofensivos, salvo que lleguen a coincidir en áreas con presencia de marea roja, que es un fenómeno que incrementa la disponibilidad de agentes tóxicos que son consumidos por las salpas", explicó.

Detalló que al ser consumidas las toxinas propias de la marea roja, en este caso por las tortugas, les provoca parálisis del sistema motriz y con ello incapacidad para moverse y salir a respirar, causándoles la muerte por ahogamiento e intoxicación.

La atención del equipo técnico del Centro Mexicano de la Tortuga, en primera instancia se enfocó a aplicar a cada ejemplar carbón activado, seguido de purgante rojo a través de una sonda, así como antihistamínicos, desinflamatorios y sueros.

Durante su recuperación, se les mantuvo fuera del agua y posteriormente se les reintrodujo en piletas ayudadas por chalecos flotadores para impedir ahogamientos.

La observación, hidratación y atención con medicamentos es permanente; se realizan los procedimientos médicos veterinarios, de acuerdo al conocimiento de los especialistas. Los quelonios que han presentado mejores condiciones, se les han retirado los chalecos y están en observación para ver si necesitan apoyo para mantenerse a flote.