Disfrute gratuito de playas perjudica así a este sector

CIUDAD DE MÉXICO

La Reforma a Ley General de Bienes Nacionales aprobada el jueves por el Senado de la República, que reduce de 20 a 10 metros la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat), que comienza donde termina el mar tierra adentro, representa un duro golpe a los ingresos de los municipios y severas afectaciones a los ecosistemas costeros.

En entrevista, Jorge Iván Cáceres, asesor ambiental de Maris Consultoría Integral, explicó que esta iniciativa que sin duda es muy “popular”, porque garantiza el libre acceso, uso y disfrute gratuito de las playas, se traducirá en una reducción de 50 por ciento en la recaudación por el cobro de concesiones de Zofemat, por parte de 165 ayuntamientos en los 17 estados costeros del país.

Detalló que el monto aproximado que dejará de ingresar a las arcas locales es de aproximadamente 350 millones de pesos por más de 12 mil concesiones otorgadas, tomando en cuenta que, en 2017, los cobros por este concepto fueron de 677.3 millones de pesos, gracias a un acuerdo de coordinación fiscal con la Federación.

“El 70 por ciento de los ingresos los utiliza el municipio para programas sociales y gasto corriente, mientras que con el otro 30 por ciento se hacía un fondo para labores de limpieza, vigilancia e inspección de la zona federal”, indicó.

El exdirector general de la Zona Federal Marítimo Terrestre y Ambientes Costeros de la Semarnat, señaló que la iniciativa impulsada por el senador morenista de Quintana Roo, José Luis Pech, afecta a los sectores más vulnerables como personas que rentan sillas y sombrillas a la orilla de la playa o dueños de pequeños restaurantes, que gracias a la concesión podían sacar a flote sus negocios.

Dijo que en todo caso los más beneficiados son los grandes hoteles que dejarán de pagar el 50 por ciento de Zofemat, y lo más que harán es recorrer sus camastros.

El doctor en Uso, Manejo y Preservación de los Recursos Naturales, manifestó que con esta reforma también se impacta negativamente la protección de playas que sirven como santuarios, humedales y pantanos, donde ahora no se podrá restringir el acceso al público en general.

Recordó que no todas las concesiones en la zona federal son privadas, sino también se otorgan a través de acuerdos de destino, cuando se trata, por ejemplo, de campamentos tortugueros o para la protección de aves, que verán reducida de 20 a 10 metros su área para la conservación de especies.

Ante esta situación, Jorge Iván Cáceres hizo un llamado a los diputados, que en breve recibirán la reforma aprobada por el Senado, a analizarla a fondo y consultar a todos los sectores, incluida la academia, y la propia Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que no fue tomada en cuenta para las modificaciones a la Ley General de Bienes Nacionales, antes de tomar una decisión al respecto.

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