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Nacional

Detienen a centenar de migrantes que se unirían a caravana

Un grupo de migrantes hondureños que caminaba sobre la carretera, en el tramo que va de Suchiate a Tapachula, fue asegurado por la Policía Federal y del Instituto Nacional de Migración

Redacción / Fotografía: Archivo, Cuartoscuro | 27-10-2018

CIUDAD DE MÉXICO. 

Un grupo de migrantes hondureños que caminaba sobre la carretera, en el tramo que va de Suchiate a Tapachula, fue asegurado por la Policía Federal y del Instituto Nacional de Migración (INM), al intentar caminar en caravana, durante un operativo que se desarrolló en la salida de la cabecera municipal.

Las personas, que fueron interceptadas al filo del mediodía de ayer, habían ingresado ilegalmente a México, por lo que los elementos del INM los subieron a cinco autobuses y al parecer fueron trasladados a la estación migratoria Siglo XXI en la ciudad de Tapachula y luego fueron deportados.

Se espera que en el transcurso del fin de semana llegue a Tecún Umán, Guatemala, otra caravana provenienente de Honduras, con el fin de llegar hasta Estados Unidos.

 

LOS NIÑOS, LOS MÁS PERSISTENTES

 

A los niños de la caravana hondureña ni el sol, el calor ni la lluvia los desanima. Caminan al mismo ritmo que sus padres, abordan vehículos y comen lo que les regalan.

Neftalí uno de los niños migrantes que van en la caravana en compañía de su madre y hermanos, sueña con ser militar para combatir la delincuencia.

Nos venimos con mi mamá porque me querían meter a las maras (...) mi mamá por eso dijo ‘de una vez que está la caravana, vámonos’ y nos vinimos”.

Jerson, es otro niño que camina junto a su madre y sus hermanos menores. Sueña con ser abogado y camarógrafo, estudiaba el sexto año de primaria y, a pesar de las condiciones climáticas, no se ha cansado en su caminar.

 

CARAVANA, YA EN ARRIAGA

 

El recorrido de más de 100 kilómetros, desde Pijijiapan hasta el municipio de Arriaga, Chiapas, (la guarida de La Bestia) comenzó a las 3 de la mañana.

Al llegar, una pipa de agua estacionada junto a las vías del ferrocarril fue, literalmente, un oasis para los visitantes quienes aprovecharon para lavar su ropa y darse un buen baño.

Después vino el festín: 150 kilogramos de carnitas donadas por voluntarios y el ayuntamiento.

-Ernesto Méndez

Aquí el reportaje completo:

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