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Oka Giner cuenta historias de inclusión

La actriz chihuahuense fue víctima de críticas por su físico y forma de hablar. Ahora celebra que haya más respeto y aceptación de personajes que antes no aparecían en los proyectos

Lucero Calderón | 11-06-2021
Foto: Cortesía Luis de la Luz
Foto: Cortesía Luis de la Luz

CIUDAD DE MÉXICO.

Cuando Oka Giner llegó en 2012 a la Ciudad de México se dio cuenta que en el mundo de la actuación imperaba la rudeza, porque la criticaban por su forma de vestir, por cómo hablaba y llegó a escuchar frases como: “No tienes cintura”, “estás gorda” o “tu cuerpo es raro”. 

La chihuahuense confiesa que llegó a sentirse frustrada,  hasta que aprendió a hacer de lado esos comentarios y seguir adelante con su carrera en la que ha destacado con títulos como Gossip Girl: Acapulco, Señorita pólvora, La piloto, Madre sólo hay dos o La venganza de las Juanas, serie que estrenará en Netflix.

Vivencias hay muchas y por experiencia propia te podría decir que el medio se sentía muy rudo. Sin embargo, tenemos más inclusión y representación en la televisión, así como en las plataformas, pero falta mucho por hacer, para que no haya críticas, como le sucedió a Fátima Molina, a quien considero una gran actriz y que al protagonizar un proyecto  enfrentó un movimiento que la criticaba por no cumplir con  ciertos estándares de belleza, algo inverosímil. He aprendido a no tomarme nada personal ya que son situaciones que no dependen de mí. Imagínate si cargara con lo que piensan los demás, voy a sufrir toda mi vida”, contó Oka Giner a Excélsior.

Originaria de Camargo, Chihuahua, Oka Giner alcanzó popularidad en nuestro país con Gossip Girl: Acapulco y poco a poco fue escribiendo nuevos capítulos en su carrera. Hace poco se le vio como una chica homosexual en Madre sólo hay dos, serie que anunció una segunda temporada. Asimismo, Oka será una de las protagonistas de La venganza de las Juanas, serie basada en la adaptación de la exitosa novela Las Juanas.

Está muy cool el proyecto. Habla del empoderamiento femenino y aborda temas de la mujer actual, vemos como protagonistas a cinco hermanas que no se conocen y que por azares del destino se unen, se apoyan y solidarizan para llevar a cabo una  venganza.

Después de lo vivido, para mí es importante hablar del papel de la mujer y más con todos los movimientos que estamos viendo, de todo lo que como género ya no podemos permitir. Como mujeres aquí estamos, nos podemos ayudar y juntas podemos”, explicó la actriz, quien definió a su personaje como una heroína. 

Cabe destacar que La venganza de las Juanas, producida por Lemon Films para Netflix, contará también con las actuaciones de Zuria Vega, Renata Notni, Carlos Ponce, Pablo Astiazarán,  Carlos Athié y Federico Espejo.

Sobre el poder interpretar papeles de personajes que hace unos años no tenían presencia en las historias, como fue cuando interpretó a una lesbiana, Oka dijo celebrar la diversidad que hay en la pantalla y que existe en la vida real.

Me parece importante  estar en una pantalla y representar a un personaje gay. Me gusta fantasear y ser muy romántica, al pensar que en algún pueblo hay una niña que ya no se va a sentir mal o rara por ser distinta. Me gustaría pensar que las nuevas generaciones no van a sufrir, como nuestras generaciones lo hicieron, por ser distintas”, subrayó Giner.

Ante la pregunta de cómo ha vivido esta época de pandemia, que nos obligó a modificar nuestras vidas en varios sentidos, la joven norteña se sinceró al contar que la pasó muy mal y que se dio cuenta de cuán necesario es darle un lugar en la mesa de debate a la salud mental, más cuando se ha perdido a un ser querido.

Para mí ha sido rudo desde que empezó la pandemia y me hizo reflexionar acerca de la salud mental. En diciembre de 2019 mi papá falleció y yo empiezo en enero a grabar Madre sólo hay dos. Sentía que yo todo lo podía y me refugiaba en el trabajo, pero cuando me encierran en marzo por la pandemia, todo se me derrumbó. Yo no sabía qué hacer con lo que sentía, empecé a tener ataques de pánico, ansiedad y entré a terapia para poder sobrellevar todo. Hoy en día me siento más tranquila e ir a terapia, en pleno siglo XXI, después de pasar una pandemia, es un tabú, pero no debería ser así, pues la terapia es buena para aprender a sobrellevar nuestros duelos y procesos”, remató Giner.

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