Logo de Excélsior                                                        
Expresiones

La libertad como guía; Claudia Marcucetti habla sobre su novela ‘Fuego que no muere’

La escritora italiana recrea la vida y los ideales de Tina Modotti y Vittorio Vidali

Virginia Bautista | 29-12-2022
Fotos: Marisol Cid/ Cortesía Planeta
Fotos: Marisol Cid/ Cortesía Planeta

 

¿Qué estamos dispuestos a hacer los seres humanos para conseguir nuestros ideales, tanto a nivel político como amoroso o artístico? De esta pregunta parte la escritora italiana radicada en México Claudia Marcucetti para dar vida a su novela más reciente, Fuego que no muere (Planeta).

La fotógrafa Tina Modotti (1896-1942) y, sobre todo, el político y militante comunista Vittorio Vidali (1900-1983), el último amante de la artista gráfica, sobre quien recayó la sospecha de ser el responsable de su muerte, son los protagonistas de esta propuesta que mezcla la investigación histórica con la ficción policiaca.

Uno tiene que conocer sus límites y confrontarse con su ética, sus valores e ideas. Por eso traigo a estos personajes del pasado a una realidad que nos concierne a todos. Además de la historia, exploro su parte más humana y psicológica”, afirma.

La novela comienza cuando el cuerpo de Modotti está en la morgue de la Ciudad de México, tras haber muerto de un ataque cardiaco dentro de un taxi. “Al menos eso se dijo. Pero el hijo del forense, el fotógrafo Armando, quien la conoció y la admira, decide buscar la verdad inspirado en el recuerdo de Tina”.

Quien hace 20 años dejó la arquitectura para explorar en la literatura agrega que este personaje representa sus sentimientos. “Él tiene mucho de mí, de mis inquietudes, mis concepciones en torno a la política, al amor, al arte y el amor-odio hacia ese mundo ideológico que no alcanza a llenar las expectativas de la gente, el comunismo”.

 

Modotti y Vidali, los dos italianos, activistas, solidarios, que nunca traicionaron sus ideales y fueron capaces de evolucionar. “El fuego que no muere es la libertad y el ansia de justicia”, dice.

La autora de las novelas Los inválidos, Heridas de agua y Donde termina el mar destaca que decidió que Vidali sería el coprotagonista, porque “me interesó alumbrar su vida, aún hay mucha controversia sobre él y su trayectoria es desconocida en Latinoamérica”.

Narra que se convenció cuando el historiador británico Hugh Thomas le dijo: “‘Tu personaje no es Tina, sino Vidali, porque si cuentas su vida contarás la historia del comunismo en el siglo XX’. Eso fue lo que más me movió”.

Marcucetti admite que “el gran descubrimiento de la novela está en Vittorio. Me fue difícil, porque es un personaje complejo y su vida ha sido muy documentada. Incluso, en sus libros biográficos, nunca cuenta toda la verdad; los escribió desde la vejez, vienen de sus recuerdos. Además, desea salvaguardar al Partido Comunista y a sus ideas. Fue todo un reto hacer un análisis imparcial”.

Añade que ofrece un panorama preciso de varios eventos, no sólo de la muerte de Tina. “También del asesinato de Trotsky, de la participación que Vidali tuvo en el atentado que su amigo Siqueiros perpetró contra Trotsky, del asesinato del líder cubano Julio Antonio Mella y lo que pasó en la Yugoslavia de Tito.

Vittorio fue amigo de Lombardo Toledano, de Pablo Neruda, Rafael Alberti. Se peleó con Diego Rivera a muerte dentro del Partido Comunista. Era tremendo”.

Aclara que trató de evitar el sesgo político. “Siempre me he mantenido ajena a la política. Tengo una visión imparcial de la historia per se. Para poder llegar más fácilmente a la verdad detrás de la Historia”.

Detalla que investigó en libros, archivos y hemerotecas. “Me interesaba que los sucesos quedaran bien documentados. Pero que el lector tuviera una buena novela policiaca, entretenida. Aunque tal vez lo hice sufrir con mi reflexión sobre estos temas”.

Finalmente, sobre Modotti concluye que fue una mujer valiente que siempre fijó su camino. “Muchos dicen que sus amantes la guiaban, pero fue al contrario. Ella se juntaba con hombres que respondían a sus ideales: la bohemia, el arte, el cine mudo, la raza mexicana, la fotografía. Acorde a sus cambios, mudó de pareja.

El hilo conductor de su vida fue su sensibilidad hacia la justicia social. Fue una mujer afectada por el dolor ajeno. Renunció a sí misma y luchó contra la injusticia. Espero ofrecer una imagen más completa de ella en esta novela”, indica.

 

cva

*En el siguiente enlace encontrarás las noticias de Última Hora

Visita nuestra Última hora

*También checa nuestras Galerías

Visita nuestras Galerías

Conoce lo más viral en Facebook Trending 

Lee a los columnistas de Excélsior Opinión

 

 

 

 

 

Te recomendamos

Tags

Comparte en Redes Sociales