Recibe las últimas noticias y mantente siempre informado
CIUDAD DE MÉXICO.
Algunos llevan más de tres décadas alimentando sonrisas y causando asombro entre los visitantes, otros han rebasado los 20 años superando la expectativa de supervivencia que tendrían en una vida silvestre. Son los abuelitos del Zoológico de Chapultepec que requieren cuidados médico-veterinarios especiales, así como dietas más equilibradas para tener un adecuado nivel de bienestar.
A pesar de que los diferentes padecimientos que se presentan se van acentuando con la edad, ellos siguen siendo parte importante de sus familias en este zoológico, en el que por años han sido admirados por millones de visitantes.
Snoopy, un zorro del ártico de 13 años (que traducidos a la edad humana representan más de 77 años de vida), es el único animal que ya no se encuentra en exhibición, debido a sus problemas geriátricos.
Todos los días recibe termoterapia, ya que ha disminuido el movimiento de sus piernas traseras debido al crecimiento de los huesos en la columna, algo normal en un zorro de su edad.
Este ejemplar casi no mueve los miembros posteriores, pasaba más tiempo postrado, entonces se hizo una revisión, estudios radiográficos para determinar sus condiciones y se inició con las terapias”, explicó Alberto Olascoaga Elizarraráz, médico veterinario y maestro en Ciencias de este zoológico.
La panda Shuan Shuan cumplió 32 años el pasado 15 de junio. Es la sexta cría de la pareja Ying Ying y Pe Pe, quienes llegaron a México en 1975 por una donación que hizo China, por lo que es una panda que ha crecido y envejecido en este zoológico de Chapultepec, siendo una de las especies más admiradas por los visitantes.
Y aunque en esta panda es difícil percatarse que ya es abuelita, hay otras especies que sí denotan su edad, pero “a veces se juzga sin saber y si ven a un mono araña que está medio pelón la gente dice ‘lo tienen muy mal’ y no es que esté mal, hay uno muy jovencito y entonces no puede comparar un monito de 6 años con una monita de 25 años. La edad se nota”, puntualizó Rafael Tinajero Ayala, director de Conservación y Bienestar Animal de la Secretaría de Medio Ambiente.
En entrevista con Excélsior, detalló que la longevidad de la fauna silvestre en cautiverio puede sobrepasar a veces lo que es en vida libre, pues en forma silvestre siempre están a expensas de depredadores, cambios climáticos, exposición de alimentación y competencia.
Un animal en vida libre que no camina bien, que no corre bien, que no vuela bien, es presa fácil de un depredador y no sobrevive”, explicó.
Indicó que si los abuelitos del Zoológico de Chapultepec han rebasado la expectativa de vida es porque están bien cuidados.
Un zoológico es un museo vivo, es una gran familia de fauna donde hay recién nacidos, adultos, algunos en edad reproductiva, otros en edad geriátrica. No por ser viejitos se van a sacar de la colección ni se van a esconder”, subrayó.
Enfatizó que la gente suele juzgar a los animales viejos y su condición se confunde con mal estado, cuando en los zoológicos se hacen labores para conservar especies de fauna silvestre.
Igual de importante es un recién nacido que un animal maduro o uno senil; todos se cuidan, porque eso debe hacerse en las familias”, concluyó Tinajero Ayala.
cva