Crisis por Covid-19 pone en riesgo a trabajadores informales; piden apoyo

CIUDAD DE MÉXICO.

Desde que inició la fase 1 por el Covid-19, el Salón de fiestas Bex ha visto disminuidas sus ganancias en medio millón de pesos.

Este salón de fiestas de la Ciudad de México es uno de los negocios afectados por las pérdidas económicas del Covid-19, que se suman a la incertidumbre sobre el futuro del personal, quienes son trabajadores informales.

El anuncio del gobierno federal por la suspensión de actividades ante el Coronavirus pone en riesgo la estabilidad económica de meseros, cocineros, personal de montajes, garroteros, músicos y banqueteros, por lo que se tendría que contemplar un apoyo directo para los trabajadores que viven al día, así lo consideró, el director comercial de Mazzot Banquetes Salón de Fiestas, Carlos Santos.

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Se ha reducido drásticamente. No podemos recibir anticipos de ningunos eventos, no sabemos qué sigue. No podemos obtener recursos en el aspecto de que la gente no llegue, no piden informes, no te piden un contrato para reservar su fecha para su evento, llevamos 500 mil pesos sin percibir”, lamentó.

Carlos Santos consideró que los más afectados son los trabajadores que viven al día. Para ellos un cierre de los negocios representa no poder garantizar el alimento y sustento de sus familias.

En cierta manera no necesitaríamos el apoyo para nosotros, yo creo que para toda la gente que trabaja en lo informal de este negocio. Se está hablando en que van a dar créditos a taquerías a pizzerías, a gente que tiene un pequeño negocio, pero entonces sí no tienes un pequeño negocio no te pueden ofrecer nada”, expresó.

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José Bolaños Sánchez, quien se dedica a montajes en salones de fiesta desde hace ochos años, señala que gana dos mil 400 pesos a la quincena, con la disminución de actividades y el reciente anuncio de suspensión de actividades, su mayor temor no solo es garantizar el abasto de su esposa y sus tres hijastros, sino no enfermarse en la contingencia, al no tener seguro médico.

No sabemos de qué vamos a sobrevivir porque si no hay trabajo en ningún lado no podemos hacer gran cosa. Es una preocupación. Si se llega a enfermar alguien. Al no tener dinero para ir a un hospital”, confesó.

José se traslada desde Valle de Chalco, Estado de México al salón de fiestas ubicado en San Pedro de Los Pinos. Él rechazó tener otra forma de tener ingresos.

No sabemos de qué vamos a sobrevivir porque si no hay trabajo en ningún lado no podemos hacer gran cosa”, dijo.

Para el director comercial, a diferencia de la pandemia de influenza AH1N1 de 2009, en esta ocasión las redes sociales y la información han jugado un papel importante en la población, sin embargo, no hay la certeza de los tiempos de cierre, como hace 11 años cuando los negocios sólo cerraron dos semanas.

Están marcando un tiempo bastante extenso, que para muchos negocios es la muerte. Hay gente que paga renta, que vive de producir dentro de ese negocio de lo que vive, y sí da más miedo”, lamentó.

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