CIUDAD DE MÉXICO.
Dicen que de la panza nace el amor, y en estos días, en el marco del empalagoso día de San Valentín, la comida tradicional mexicana es una buena opción para terminar de recuperar los kilitos perdidos por los propósitos fitness no logrados de año nuevo.
El ingenio, y por supuesto el toque característico de los enamorados, hace que la gente llegue a la antojería La casita, ubicada en la colonia Obrera en la Alcaldía de Cuauhtémoc, donde desde hace 5 años se preparan los sopes con un detalle especial para las parejas.
Foto: Rodolfo Dorantes
En forma de corazón y una tortilla hecha artesanalmente con maíz nixtamalizado, los “corasopes“ comienzan a ser una tradición para quien busca una manera distinta de celebrar a su novia, esposa o amante.
Le ponemos frijoles refritos, encima lleva bistec con longaniza, lo que viene siendo un campechano y finalmente se adorna con crema, queso y rebanadas de aguacate" detalló el encargado del lugar ubicado en la calle de Simón Bolívar #179.
Para hacer una variante del "corasope" y satisfacer todos los paladares, en esta ocasión, los propietarios decidieron comercializar la "coragordita", "corataco" y "coratostada", productos que comienzan a ser los favoritos de sus clientes.
Foto: Rodolfo Dorantes
El restaurante garantiza todas las medidas básicas de seguridad para evitar contagios de covid-19, sin embargo, para quien lo desea, puede hacer su pedido y entregarlo en una caja decorada.
Pese a la gran cantidad de parejas que llegan al lugar, hasta el momento no ha habido alguna que se atreva a pedir matrimonio, sin embargo, los empleados no descartan que pueda ocurrir en este año.