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Remozan pedestales en Paseo de la Reforma

En cinco meses los basamentos de las esculturas deberán regresar al estado que tenían a finales del siglo XIX

Arturo Páramo / Fotos: Salomón Ramírez | 02-07-2013

CIUDAD DE MÉXICO, 3 de julio.- Las capas de pintura sobre los pedestales de las esculturas que existen en el Paseo de la Reforma son retiradas lentamente por una cuadrilla de la Secretaría de Obras.

La tarea de estos trabajadores durante los próximos cinco meses será dejar los basamentos de las esculturas en el estado que tenían a finales del Siglo XIX, cuando Porfirio Díaz inauguró las primeras esculturas en el nuevo paseo capitalino.

Rafael, uno de los trabajadores que limpian a punta de cincel el pedestal de la escultura de Leandro Valle, explicó que la labor será la de retirar las capas de pintura que han sido colocadas al paso de los años para cubrir grafitis o para uniformar el color de todos los basamentos.

De acuerdo con el trabajador, la obra consiste en dejar la cantera en su estado normal a la vista, pulirla y permitir que la piedra “respire” a través de sus poros naturales.

“La cantera no debe ser pintada, tiene que estar al natural. Vamos a quitar toda la pintura y luego a pulirla un poco para dejarla lo más natural posible”, explicó el trabajador que labora en el camellón de Paseo de la Reforma.

Hasta el cierre de esta edición, la Secretaría de Obras, dependencia responsable de los trabajos de limpieza de los basamentos, no había brindado la información solicitada sobre el costo de los trabajos en el Paseo de la Reforma, su alcance y duración.

Tampoco informó sobre si serán repuestas las placas de identificación de las esculturas que hay a lo largo del Paseo de la Reforma, pues además de la cantera dañada por pintura y grafitis, en noviembre de 2013 Excélsior documentó que de las 37 estatuas existentes en el tramo que va de Bucareli a Río Tíber faltan 14 placas biográficas, de cuatro de las esculturas fueron robadas espadas y uno de los bronces, junto con su pedestal, desaparecieron.

La estatua en honor al doctor Rafael Lucio fue sustraída del Paseo a inicios de 2011 sin que a la fecha haya noticias de su paradero.

La zona mejor conservada es la cercana al Ángel de la Independencia, lo que no ha impedido que la escultura de Miguel Ramos Arizpe, la más próxima a la Columna de la Independecia, sólo tenga una de las dos placas biográficas con que debe contar.

A su escultura vecina, en homenaje a Juan José de la Garza, le fue robada la espada.

En el tramo de la Glorieta de La Palma a Insurgentes faltan cinco placas en las esculturas y a la de Guadalupe Victoria, ubicada frente a la nueva sede del Senado, le falta una placa y la espada está rota.

El caso más dramático es el de Prolongación Paseo de la Reforma, de Puente de Alvarado a Eje 2 Norte, donde carecen de placa de identificación 38 de las 39 esculturas que hay en ese tramo. Sólo Ignacio Manuel Altamirano ha sido respetado por los vándalos.

Las placas tenían unos 70 centímetros de largo por unos 30 de ancho. En su lugar sólo quedan los orificios de los tornillos que estaban anclados a los pedestales.

En junio, en el tramo de Prolongación de Eje 2 Norte a Violeta, los basamentos de las esculturas fueron pintados de gris por parte de la delegación Cuauhtémoc.

Cabe señalar que la totalidad de los basamentos que hay en todo el Paseo de la Refora han sido pintados en repetidas ocasiones para ocultar grafitis.

En ese sector de Reforma no hay trabajadores de la Secretaría de Obras laborando para dar mantenimiento a los basamentos.

El sistema de iluminación que había en el piso del camellón para los bronces se encuentra destrozado.

 

asj

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