Diez formas de cómo hacer rendir la quincena

Es vital adoptar estrategias inteligentes para manejar nuestro dinero de manera eficaz. No solo se trata de cubrir nuestras necesidades básicas, sino también de encontrar maneras de disfrutar sin comprometer nuestra salud financiera.

Cada vez las quincenas parecen durar menos. Cada vez que pagan la quincena se aglomeran gastos y pagos lo que significa una dificultad para estirar el dinero y llegar al siguiente depósito.

Aquí te damos algunos recomendaciones para sobrevivir la espera de la siguiente quincena con tu tarjeta de crédito.

Usa la tarjeta de crédito con estrategia. Paga con ella en los primeros días después de la fecha de corte, esto te dará hasta 40 días para realizar el pago de esos gastos sin que generen intereses. Puedes usarla para cubrir los servicios, la gasolina, o algunos bienes de consumo que utilizarás a lo largo de las semanas.

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Mantén al corriente tus pagos. Tu tarjeta de crédito sólo es de utilidad si no tienes pagos atrasados, de lo contrario, será como llenar un bote de agua con hoyos. No te excedas los fines de semana. Generalmente, las quincenas se hacen largas cuando recibimos el pago antes del fin de semana.

Evita “derrochar” en antojos y “gustitos” esos primeros dos días. Aparta el gasto que de tus compromisos. Es fundamental separar el dinero para la renta o el pago de alguna mensualidad; también lo que destines para el ahorro. No se trata de privarse de todo, pero sí evita “invitar” o despilfarrar en todos las salidas.

Arma un presupuesto diario. Cuando tengas la cantidad de dinero real para el resto de la quincena, divídelo entre los días que te debe “durar” tomando en cuenta lo que necesitas para transporte, comida y otros pequeños gastos.

Presupuesta tu entretenimiento. Ya sea que vivas en pareja, tengas familia o estés en soltería, fija una cifra para entretenimiento, tomando en cuenta que esto incluye las salidas a comer o cenar.

No a las compras innecesarias. Aunque te llegue un cupón de descuento de las tiendas en la que sueles comprar regularmente, o una promoción de meses sin intereses, si no necesitas algo en específico, déjalo pasar y no gastes. En menos de que lo piensas, te llegará otro.

Guarda las tarjetas: úsalas para lo que determinaste necesario, sólo los primeros días después de la fecha de corte, Ajústate en la medida de lo posible al presupuesto que armaste. Aprende a no vivir del dinero que aún no cobras.

Ahorra. Es mucho más recomendable programar una sola ida al súper y preparar tus alimentos para llevar al trabajo, aunque suene trillado, te sorprenderá lo mucho que puedes ahorrar cuando no compras diario un café.

Compara: vale más caminar un par de cuadras más para ir al supermercado, que conformarte con lo que hay en la tienda de conveniencia de la esquina, donde los precios aumentan considerablemente y no hay una variedad de marcas para comparar precios.

Practica estos sencillos pasos y libérate de la presión de llegar siempre en ceros a la siguiente quincena.

Adoptar estas recomendaciones puede marcar una diferencia significativa en cómo manejas tus finanzas personales, especialmente durante los periodos críticos del año. La clave está en ser proactivo y consciente de tus hábitos de gasto, buscando siempre maximizar el valor de cada peso. Al adoptar un enfoque estratégico hacia el uso de tu tarjeta de crédito y el manejo general de tus finanzas, puedes disfrutar de una mayor