Ajedrecistas hijos de Bobby Fischer

La presencia de Bobby Fischer como uno de los ocho aspirantes al Campeonato Mundial en el ciclo de matches-candidatura en 1971 le comunicó un singular atractivo al ajedrez en la esfera internacional. La secuencia de 6-0 sobre el soviético Mark Taimánov en Vancouver, Canadá; de 6-0 al danés Bent Larsen en Denver, Colorado y la explosión que provocó en el teatro San Martín de Buenos Aires al vencer a La Roca, el armenio Tigran Petrossian ex monarca mundial por 6 ½ - 2 ½ (+5, =3, -1) -impactante fueron las cuatro derrotas consecutivas que sufrió Petro-, entre el 30 de septiembre de y 26 de octubre de aquel año de 1971 fueron el preludio del más grande acontecimiento deportivo mundial que haya presenciado en el deporte al través de los medios de comunicación del planeta con el match Fischer vs. Boris Spassky en Reyjkjavik, Islandia, en 1972 y que concluyó con la resonante victoria del estadunidense 12 ½ - 8 ½.

En las últimas semanas se recordó el medio siglo del duelo Fischer-Petrossian y la trascendencia que alcanzó en Buenos Aires y Argentina. Algunos de aquellos niños de 10, 11 y 12 años que acudieron al teatro tomados de las manos de sus padres a presenciar el Match Final de Candidatos Fischer vs. Petrossian, y que hoy se hacen llamar “ajedrecistas hijos de Bobby Fischer”, entre ellos Enrique Aguirañiz, el periodista y moderador Claudio Federovsky, el maestro Pablo Alberto Pie González, Andrés Sukerfeld, Sergio Negri, Claudio Aguila, Carlos Grushka, se reunieron la semana anterior para recordar sus vivencias y cómo hoy en la etapa adulta, desde diferentes posiciones profesionales, siguen inmersos en el ajedrez conectados por los valores de amistad, estudio, de cultura, de lucha, superación, investigación que los impregnó el milenario juego.

El legado ajedrecístico que recibió Argentina de Europa en 1939 en el Torneo de las Naciones cuando un grupo de grandes maestros decidió quedarse a vivir en Buenos Aires obligados por la Segunda Guerra Mundial, entre ellos Mieczyslaw Najdorf, Gideón Stählberg, Miguel Czerniak, Erich Eliskases, Jiri Pélikan y Karel Skalicka, enriqueció al ajedrez argentino que ya había organizado en 1927 el match Capablanca–Alekhine; la mesa y las piezas en las que jugaron estos genios se guarda como una reliquia sagrada en el Club Argentino de las calles de Paraguay. En la década de los 50 Argentina cosechó las lecciones de los maestros al ocupar el segundo lugar, después de la URSS, en 1950 en Dubronik, 1952, Helsinki, 1954 en Amsterdam. (I).

El campeonato de Europa entra la a recta final con el match entre los seis líderes con 8 puntos: Rusia-Hungría, Azerbaiyán-Armenia y Ucrania-Países Bajos. Duelos importantes además: Rumania-España, Frfancia-Grecia.

Blancas: Andrey Esipenko, Rusia, 2,713. Negras: Andreas Kelires, Grecia, 2,535. Defensa Sicliana, V. Najdorf, B94.

R–1, C. de Europa, Catez, Eslovenia, 12–11–2021.

1.e4 c5 2.Cf3 d6 3.d4 cxd4 4.Cxd4 Cf6 5.Cc3 a6 6.Ag5 Cbd7 7.De2 Dc7 8.0–0–0 e6 9.g4 h6 10.Ad2 e5 11.Cf5 b5 12.Ag2 g6 13.Ce3 Ab7 14.h4 b4 15.Ccd5 Cxd5 16.exd5 a5 17.h5 Aa6 18.De1 Cc5 19.Rb1 Ag7 20.Af1 Axf1 21.Cxf1 Tc8 22.Cg3 0–0 23.hxg6 Cd3 24.cxd3 Dc2+ 25.Ra1 e4 26.Tb1 Da4, con la idea de jugar b3 con imagen de mate. 27.Dxe4, mejor Cf5, Tfe8 28.gxf7+ Rxf7 29.Df4+ Rg8 30.Cf5 1–0.

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