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Nacional

Onésimo cuelga sotana tras carrera polémica

El obispo nunca eludió hacer comentarios políticos, particularmente en contra de los partidos y gobiernos de izquierda

Héctor Figueroa | 08-05-2012

CIUDAD DE MÉXICO, 8 de mayo.- Ayer, a sus 75 años de edad, como establece el Derecho Canónico, Onésimo Cepeda Silva se convirtió en obispo emérito al dejar sus funciones como jerarca religioso de Ecatepec, según lo aceptó el papa Benedicto XVI, quien aún no ha designado un sucesor.

Hace tan sólo 45 días, en la fecha de su cumpleaños (25 de marzo), el alto prelado solicitó al Pontífice romano el retiro de sus funciones, motivado también por problemas de salud.

Excélsior constató dos días antes, el 23 de marzo, durante la visita del papa Benedicto XVI a Guanajuato, que Cepeda lucía fatigado y aun así participaba de los actos litúrgicos.

En 2010, las afecciones cardiacas de Cepeda aumentaron y en noviembre de ese año el purpurado fue trasladado en helicóptero a un hospital de la Ciudad de México con el propósito de realizarle una angioplastía (cirugía para dilatar una arteria ocluida), luego de sufrir un infarto.

Uno de los hombres de Iglesia más polémicos de los últimos años, experto en leyes y perteneciente a una familia acaudalada, se despidió ayer de fieles y periodistas en la Catedral de Ecatepec.

Dijo entender a los representantes de los medios de comunicación, porque, aseguró, gran parte de su trabajo es hacer escándalo, y apuntó que a las moscas se les mata a periodicazos, “y a periodicazos no me mataron, sigo vivo”.

El Vaticano informó a través de un breve comunicado que el papa Benedicto XVI hizo efectivo el retiro de sus funciones del obispo de Ecatepec, según el artículo 401.1 del Código de Derecho Canónico, la ley fundamental que rige a la Iglesia católica.

Ese apartado establece que “al obispo diocesano que haya cumplido 75 años de edad se le ruega que presente la renuncia de su oficio al Sumo Pontífice, el cual proveerá teniendo en cuenta todas las circunstancias”.

Aunque se le aceptó la renuncia no fue designado inmediatamente su sucesor. Ni la sede apostólica ni la Conferencia del Episcopado Mexicano (CE M), que también difundió la noticia, comunicaron quién administrará temporalmente su diócesis.

En esos casos, normalmente el Papa acepta la renuncia obligatoria de un obispo cuando ya se eligió a su sucesor y entonces El Vaticano informa de la jubilación de un prelado anunciando, al mismo tiempo, el nombramiento de quién quedará en su lugar.

Su vida

El obispo nunca eludió hacer comentarios políticos, particularmente en contra de los partidos y gobiernos de izquierda.

Nació en 1937 en el Distrito Federal, estudió leyes en la UNAM, y posteriormente en el Seminario del Instituto Nuestra Señora de Guadalupe para las Misiones Extranjeras, donde cursó Filosofía.

En la Universidad de Friburgo, Suiza, estudió Teología. Durante su carrera protagonizó diversas polémicas. Amigo personal del empresario Carlos Slim Helú, fue banquero y agente de bolsa, cofundador de la Casa de Bolsa Inversora Bursátil, luego conocido como Grupo Financiero Inbursa.

Pasó por algunas de las empresas más importantes de México, como el Grupo Financiero Banamex, Banamex-Citigroup, Ingenieros Civiles Asociados (IC A) y Televisa, entre otras.

En los años 80 y principios de los 90 fue sacerdote en la Diócesis de Cuernavaca. Por esos años también fue dirigente nacional del Movimiento de Renovación Carismática, que impulsa una línea pastoral opuesta a la de la Teología de la Liberación.

Desde 1995, el papa Juan Pablo II lo designó como el primer obispo de recién creada Diócesis de Ecatepec.

Presidió la comisión para las Comunicaciones Sociales de la CEM y fue asesor legal de ese organismo entre 1997 y 2000.

En 2010 fue acusado de fraude por, supuestamente, apropiarse de 42 pinturas de la colección privada de la familia Azcárraga por un valor de 130 millones de dólares. En esta colección destacan pinturas de Francisco de Goya, Pablo Picasso, Salvador Dalí, Amadeo Modigliani, Diego Rivera, Frida Kahlo y Rufino Tamayo, entre otros.

El prelado es acusado de actividades fraudulentas a través de su empresa Grupo Certificados Integrales Funcionales (Grupo CI F), que da servicios funerarios a varias dependencias federales y gobiernos estatales, y también fue demandado hace algunos años por realizar proselitismo político a favor del PRI.

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Fg

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