Pablo Carrillo

Pablo Carrillo
La neurona

Leyenda II

04 de Mayo de 2021

COMPARTIR
SÍGUENOS

Lo acontecido en el Texas Motor Speedway la tarde del domingo, en la que el piloto regiomontano Patricio Pato O´Ward conquistó la bandera a cuadros para erigirse como el ganador de la carrera dominical del serial IndyCar, sencillamente ha sido la mejor noticia deportiva del fin de semana. La cual, por cierto, nos trajo innumerables y grandes resultados de nuestros compatriotas por todos los rincones del planeta. Éste ha sido, francamente, un fin de semana prodigioso.

Pasaron dieciséis años y casi siete meses para volver a disfrutar del triunfo de un paisano en el IndyCar, el último en hacerlo fue el gran Adrián Fernández. Quizá valdrá la pena recordar el gran fenómeno de éxito y popularidad del volante capitalino, que a finales de la década de los noventa y en los primeros años del actual siglo generó que los aficionados al deporte motor en nuestro país se volcaran a verlo en las pistas de los Estados Unidos. Ya ni hablar de las carreras que se escenificaron en el Circuito Parque Fundidora, en Monterrey, así como en el Autódromo Hermanos Rodríguez, sencillamente resultó una pasión y alegría sin parangón, pues Fernández nos acostumbró a verlo en los sitios de punta, a ganar carreras y a generar una enorme cantidad de afición que, ante el éxito, se hizo muy asidua a ver las carreras en la televisión y a acudir a la pista cuando ese muy popular serial de autos fórmula llegaba a nuestro país.

Me atrevo a anticipar que el fenómeno que generó Adrián podría tener, nuevamente, una respuesta de los fanáticos al automovilismo en nuestro país, así como a sumar nuevos apasionados de las carreras de autos monoplazas, pues el hecho de tener a un jovencito como O´Ward, protagonizando y ganando carreras, sumará muchas más banderas a cuadros, va a generar una inercia indescriptible. La gran sensación de tener a un mexicano destacando en cualquier deporte es inigualable. Ante las cualidades del regio y las prestaciones de un gran auto, el cual le provee un buen equipo como el Arrow-McLaren, el panorama luce muy prometedor.

De seguir así las cosas, no sería difícil que pronto tengamos una carrera de IndyCar en nuestro país. Cuando eso pase de mí se acordarán. Pato O´Ward tiene madera para ser un gran campeón, adicionalmente, el carisma y simpatía del de Monterrey lo llevará a un sitio de ídolo de muchos jóvenes que, como él, quieren ser ganadores, aspiran a poner en alto a nuestra bandera, pero, sobre todo, a generar esa imagen del México ganador que todos deseamos sea la divisa hacia el futuro. Jóvenes ganadores, nacidos en nuestro país, con capacidad de triunfar en el mundo, así de sencillo. Al tiempo…

 

COMPARTIR EN REDES SOCIALES

SÍGUENOS

COMENTARIOS