Robinson Canó mantiene su fuego; nació para jugar pelota

El experimentado pelotero de los Diablos Rojos del México, Robinson Canó, compartió parte de su travesía en los mejores diamantes del beisbol mundial

Robinson Canó
Robinson lleva el nombre por la leyenda del beisbol Jackie Robinson.

Robinson Canó apenas había conectado dos imparables en sus primeros 23 turnos en las Grandes Ligas. Su participación en los primeros siete juegos con los Yankees de Nueva York en 2005 no era la esperada y al momento que se le acercó el manager Joe Torre, pensó que estaría de vuelta a las ligas menores. El experimentado timonel le tocó el rostro y le dijo: “tranquilo, los hits van a caer pronto”.

Canó bateaba apenas para .087, pero luego de las palabras de Torre se fue de 4-2 en el duelo frente a los Mariners de Seattle y siguió encendido en la gira por la costa oeste al conectar 13 hits en seis juegos. De esos inatrapables, seis fueron dobletes y su promedio lo elevó a .327. 

“A Joe Torre le estoy muy agradecido. Él me dio la oportunidad de llegar a las Grandes Ligas y ese día fue el que marcó mi vida. Me encontré con Joe Torre en el pasillo llegando al estadio y me dijo: ‘haz lo que tú sabes hacer’, eso me dio mucha confianza”, dijo Canó al recordar su primer encuentro con el manager ganador de cuatro títulos de Serie Mundial con los Yankees.

Canó se afianzó como titular de los Yankees en su primera temporada y quedó en segundo lugar de la votación para Novato del Año.

El beisbolista dominicano vivió su gran momento en 2009 al colaborar en el título 27 de los neoyorquinos. El segunda base atrapó el rodado de Shane Victorino para consumar en la inicial el out de la celebración.

“Yo decía, si viene por aquí la pelota hasta la piso si es necesario, con tal de que no pase, fue un momento de muchas emociones y muy contento porque es el sueño de cada pelotero, aparte de llegar a Grandes ligas el ganar una Serie Mundial”, menciona el dominicano que tiene a ese momento como uno de los más especiales en su carrera junto a su llamado a la  Gran Carpa y la victoria en el Home Run Derby 2011, con su papá José Canó como lanzador.

El exligamayorista, de 41 años, lleva su nombre en honor de Jackie Robinson, lo que considera un privilegio y una motivación para su carrera.

“Significa bastante Jackie Robinson porque fue quien nos abrió las puertas para los afroamericanos y los latinos y gracias a Dios hemos logrado nuestros sueños. Dios no se equivoca, tuve la oportunidad de jugar la misma posición que él a un nivel elite, me siento contento y bendecido por eso”, dijo Canó, quien estuvo 17 temporadas en el beisbol de las Grandes Ligas y conectó 2,639 imparables con 335 cuadrangulares y 1,306 carreras producidas.

El ahora jugador de los Diablos Rojos se muestra agradecido por el recibimiento de la directiva capitalina y los comentarios positivos de los aficionados, por lo que espera responder desde su debut, precisamente frente a los Yankees. 

“Sería bien bonito poder salir y ver la fanaticada que se pare a aplaudir, este tipo de recibimiento es lo que a mí como jugador me llena de orgullo y emoción, entonces uno sale a dar hasta lo que no tiene por esa gran fanaticada”.

Robinson Canó, que muestra facilidad de palabra, revela que le han hecho comentarios sobre las condiciones que tiene para trabajar en los medios de comunicación.

Con la misma facilidad para batear, toma el micrófono y hace una invitación frente a la cámara: “Hola qué tal, soy Robinson Canó y los invito a que no se pierdan los juegos entre Yankees y Diablos por Imagen Televisión”.

Temas relacionados:

COMPARTIR EN REDES SOCIALES

SÍGUENOS

Te recomendamos