Cambió el mundo

Han pasado veinte años del lamentable suceso terrorista que cambió el mundo, el ataque a las Torres Gemelas. Sin duda que a todos nos afectó de una u otra manera y al deporte también le significó un momento terrible y muy doloroso.

Por motivos de trabajo, me había desplazado hasta Frankfurt, en Alemania, para estar presente en la Auto Expo gracias a la invitación que me habían realizado los amigos de Mercedes Benz. Llovía aquella tarde en la ciudad que se había convertido en el epicentro de la industria automotriz por un par de semanas. Recuerdo que con la humedad había resbalado al subir una escalera exterior y me había lastimado dolorosamente la espinilla, por lo que regresé al hotel, pues estaba muy adolorido.  Mientras esperaba a que fuera mi turno para entrar al aire en el noticiario matutino de Imagen, llegó la esperada llamada del productor a mi habitación y me solicitaron que comentara alguna reacción al ataque que apenas había ocurrido en Nueva York. Francamente que entre el dolor y lo poco que aún se conocía de lo que había sucedido, me limité a comentar lo que había vivido en la Auto Expo.

Ninguno de nosotros imaginaba la trascendencia del acto terrorista más grande en la historia del hombre. Inmediatamente surgieron dudas del futuro, de una probable guerra, de la lógica incertidumbre en torno a los vuelos internacionales, mi probable regreso a casa, así como el resto del viaje que tenía planeado. Al día siguiente, omití el viaje aéreo a Mónaco y lo hice en tren, pues había pactado una entrevista con el muy querido Rafa Márquez, cuestión que se logró por ahí del día 13 de septiembre. Pasamos un día inolvidable Paco Morales y yo, pues fuimos al entrenamiento del Mónaco, convocados por Rafa; después fuimos a comer con él y más tarde a un recorrido por ese espectacular sitio, incluido el casino, fue un gran día. De ahí manejamos de regreso a Nimes, pues estábamos grabando unos reportajes de la feria taurina de ese mágico lugar.

De ahí viajé a Berlín para estar presente en la carrera de Champ Car en el súper óvalo de Lausitz, el Lausitzring, para acompañar al querido Enrique Hernández Pons Torres, del equipo Herdez, precisamente un quince de septiembre, el día en el que lamentablemente perdió las piernas —en un espantoso accidente— el piloto italiano Alex Zanardi, un día muy triste que, aunado al mal momento que se vivía, hizo aún más complejo ese inolvidable viaje.

Todo es distinto desde entonces, en especial los viajes y los protocolos de seguridad en los grandes eventos deportivos, al igual que en los aeropuertos, un hecho que nos impactó a todos.

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