Alegría

Comparto con ustedes una pasión que desde muy niño he tenido, el seguir a los deportistas mexicanos que son exitosos en el extranjero. Para mi fortuna, lo hago justamente mientras trabajo, con un ojo al gato, y otro al garabato. En este momento me emociona ver al de Culiacán, Sinaloa, Julio Urías en plan grande en el marco de la Serie Mundial, en la que está hasta ahora ganando el partido y lanzando como si se tratara de un muy experimentado pitcher. No perdamos de vista que, a pesar de su buen camino en los Dodgers, apenas tiene veinticuatro años.

El de la Higuerita, una pequeña población en Culiacán, ya se ha superado, pues un tumor en su ojo izquierdo le hizo padecer un sinnúmero de contratiempos y cirugías cuando era un niño, afortunadamente no le impidieron salir adelante gracias a su inmenso talento, el cual le ha valido para llegar hasta lo más alto de la pelota caliente.

Apenas a los dieciséis años el equipo de Los Ángeles lo firmó para llevarlo poco a poco hasta las Grandes Ligas, por todos lados es una gran historia de éxito. Ojalá que Urías se mantenga como hasta ahora, un jovencito que ha madurado a pasos agigantados, con una gran fe en Dios y con buen comportamiento, algo muy complejo en un ambiente donde los reflectores, los inmensos salarios y demás temas, los hacen presa de las malas influencias.

Nada me gustaría más que verlo campeón junto al otro paisano del equipo angelino, Víctor González, de Tuxpan, Nayarit, otra inmensa historia de superación, y quien gradualmente se ha hecho de un lugar en ese equipo. Sería fantástico verlos festejar en grande. Si bien para algunos la actual temporada de la MLB no tiene la misma relevancia  que otras, pues se jugaron menos de la mitad de los habituales partidos, no deja de ser muy meritorio el inmenso trabajo de los nuestros.

Cambiando de velocidad, resulta también de llamar agradablemente la atención lo que está haciendo Checo Pérez en el marco del Gran Premio de Portugal, el cual se correrá muy temprano en la mañana. Sin duda en una paradójica situación, al no tener un lugar la siguiente temporada, pues Pérez se muestra en la actualidad en el mejor momento de su carrera, es sin duda cuando más inteligente, maduro y rápido se ve en cada uno de los entrenamientos, la clasificación y en las carreras que ha disputado, dejando muy en claro su superioridad ante su coequipero Lance Stroll, que es el parámetro más cercano.

Se abren las posibilidades cada vez que Checo, sobre la pista, demuestra su inmenso bagaje y calidad. Ojalá que lo sigamos viendo la próxima temporada de la Fórmula 1.

Ojalá…

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