Ridículo histórico
17 de Agosto de 2020
El Barcelona vivió la peor humillación de su historia el viernes pasado. Nunca le habían metido ocho goles en la Champions.
Momento de tomar decisiones radicales porque un equipo que marcó una era se ha terminado.
Se tiene que ir el presidente Bartomeu y llamar a elecciones de emergencia.
Se tiene que ir Setién y el Barça necesita un técnico de primer nivel.
Se tienen que ir muchos jugadores que ya dieron todo lo que podían dar.
No hay dinero y hay que hacer una plantilla completamente nueva.
Esta generación de brillantes jugadores ya se veía que estaba acabada, pero no merecía un final tan duro.
No ganaron nada este año. Ni la Liga ni la Copa ni la Champions.
Una auténtica ruina lo que pasa con el Barcelona. Un equipo que no hace mucho tiempo era capaz con entrenadores como Guardiola o Luis Enrique de ganar tripletes.
Messi está en la parte final de su carrera y no puede cargar solo ante un poderoso equipo alemán.
Los socios no pueden quedarse con los brazos cruzados. Tienen que exigir cambios urgentes.
Se terminó una era y así hay que asumirlo. Cambio de timón, de entrenador y de jugadores.
El problema es que no hay dinero.
El Barcelona ha tocado fondo y muchos tendrían que dar un paso al costado, como ya lo hizo Piqué diciendo que es el primero en hacerse a un lado para dar paso a una nueva generación de jugadores.
El Barcelona, en estos momentos, da pena.
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