Va a estar de lujo

Con todas las complicaciones y todo lo sombrío alguna vez vaticinado para esta temporada, hoy podemos decir que ha sido para bien toda la expectativa. Considerando a equipos que llegan con extraordinario arsenal, como lo son Tampa, Medias Blancas, Minnesota, Oakland y Yanquis en la Americana, contra Dodgers, San Diego, Atlanta y Cachorros en la Nacional, sí, ha sido un rol regular trepidante sin afectar la esencia y —siendo realistas— si la idea de ser espectacular es algo dentro de esta era del “One Baseball”, lo están logrando.

Eso pide la afición: más peloteros desenfadados, con un extraordinario rango atlético para ejecutar esas jugadas —las cuales se quedan como estampas en la memoria—, sin tantas poses, sin “hacerle al divo” y ejecutar con maestría cada requerimiento de este beisbol moderno. En ese aspecto, por ejemplo, pueden ustedes observar lo milimétrico de varias decisiones sujetas a revisión con los intentos de robo de la segunda almohadilla o el out en primera como las más recurridas: llega a ser una labor de alta tecnología observar si efectivamente el bateador-corredor tocó primero con el pie el cojín (en el caso de la inicial) que la pelota al guante del primera base o, si el corredor tocó (la mayoría de las veces) con la mano primero la segunda, antes de que el fildeador lo haya tocado con el guante.

Esa precisión dentro de la exactitud en el beisbol (la pelota tocó o no tocó la raya de cal) nos da la pauta para esta ansiada etapa de playoff, donde encontraremos un bálsamo para las dificultades de este año. Esta “onda de buena pelota” deberá llegar expansivamente para los planes del comisionado Manfred en cuanto a lo que eran las sucursales (MiLB) y halle un buen esquema, necesarísimo para el beisbol actual, inmerso en un sistema competitivo con otras opciones de entretenimiento.

Debemos insistir en el nuevo acomodo y lo que implica para la LMB, la cual deberá —casi imperiosamente para una supervivencia— aterrizar un esquema de inversión por parte de los equipos de Grandes Ligas para el sistema veraniego de nuestro país, como semillero original.

La mención de Jon Morosi en una nota en MLB.com dedicada al beisbol mexicano nos da esperanza de que sigan debutando peloteros de buenas credenciales como Alejandro Kirk (Toronto), aunque nos queda la duda de por qué Edgar González —como titular de ese híbrido llamado ProBeis— habla de “su” liga de prospectos (en calidad de agentes libres), para que oootra vez observemos que la “promoción” del citado organismo está para sus objetivos propios, con o sin conflicto de interés.

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