La Dolce Vita sobre ruedas

Ha vivido aventuras por todos los continentes, ha sido estrella de cine a la que se han subido Gary Cooper, Marcello Mastroiani, Audrey Hepburn, Athony Perkins, Gregory Peck o Ursula Andres. Son apenas siete décadas de estilo y libertad.

El origen de vespa pasa por tierra, mar y aire. En 1884, Rinaldo Piaggio fundó una empresa de mobiliario para barcos, después también para trenes y en la II Guerra Mundial aviones. El vehículo incorpora mucho de las piezas del avión de combate. Piaggio era un gran constructor aeronáutico en Italia, aunque enemigo declarado del Duce, fue el creador de un gran bombardero en tiempos de Mussolini.

Al acabar la guerra recicló su negocio para crear una nueva moto, pero con los materiales que empleaba en los aviones. La carrocería era del motor de fuselaje del avión, la rueda delantera y la suspensión venían del patín de cola del avión y hasta la pintura era la misma que la del bombardero. La revolucionaria moto era toda una propuesta innovadora, con cambio de marchas en el manillar, suspensión delantera y carrocería que protegía al conductor de la suciedad de la mecánica y del viento. Al contrario que las motos tradicionales, el conductor iba sentado sobre la moto, no con la moto entre las piernas, lo que facilitaba su uso para mujeres con faldas y hasta para sacerdotes con sotana. Cabe recordar que en el primer anuncio de Vespa aparece una mujer con falda manejando.

Pronto se convirtió en un vehículo de culto. A ello contribuyó mucho el cine que agrandó la leyenda. Su presencia en la gran pantalla la hizo más atractiva y le dio glamour. Ningún otro modelo de motocicleta ha protagonizado tantas escenas memorables del séptimo arte como la Vespa. Un icono de dos ruedas que fue de la ‘dolce vita’ en Roma y despúes en el mundo.

Con el estreno de Vacaciones en Roma (1953) con Audrey Hepburn y Gregory Peck, se convirtió en un fenómeno comercial. Despúes se apuntó al movimiento underground con Quadrophenia, en los años setenta, junto a American Graffiti (1979). Después se sumaron a la Vespa, Raquel Welch, Charlton Heston, Gary Cooper, Paul Newman, Antonio Banderas o Matt Damon. A Roma con amor de Woody Allen y Bajo el sol de la Toscana, también recurrieron al uso de este encantador vehículo.

La fecha de nacimiento de Vespa es en abril de 1946, cuando es patentada y la producción se empezó a disparar. Ahora mismo la cifra de venta alcanza cerca de los veinte millones de motos vendidas. Fue subiendo de cilindrada, de 75 a 125 200 cc. Ante el éxito no le faltaron imitadores desde Rusia hasta la India.

Vespa demostró también su espíritu de aventura, aunque la urbe es su espacio natural, y Roma su capital. Se hicieron recorridos por el Círculo Polar Ártico, Japón, Groenlandia o Tierra de Fuego. En 1952 el francés Georges Monneret viajó de París a Londres en una vespa anfibia, y el propio Dalí decoró una vespa que dio la vuelta al mundo en 1962 con los pilotos españoles Santiago Guillén y Antonio Venciana que tardaron 79 días. Hoy esta Vespa 150, pintada por Dalí está considerada una obra de arte y, como tal, descansa en el museo Piaggio de Pontedera, que se puede visitar on line museopiaggio.it

El aventurero y escritor italaiano Giorgio Betinelli realizó grandes viajes en Vespa de Roma a Saigón, después de Alaska a Tierra de Fuego y otro gran viaje de Chile a Tasmania, pasando por Asia y África.  La pasión por la Vespa se extendió por todo el mundo y se crearon numerosos club Vespa. En encuentros internacionales llegan a reunirse alrededor de 5 mil aficionados que rinden culto, a este particular vehículo.

Siete décadas después, la moto de tipo scooter, continúa renovándose con tecnología, con alianzas como Dior, mejorando con frenos ABS y ya ha nacido la versión Elettrica, sin emisiones y con un nuevo horizonte. Antes vivió numerosas transformaciones como sidecar, como motocarro, hasta la Vespa helicóptero aparece en James Bond. En total ha generado más de un centenar de modelos. La casa celebra su cumpleaños con su modelo 75 aniversario, modelo Primavera en edición limitada. Un medio de locomoción que conquistó las calles y carreteras del mundo, convertida en uno de los grandes emblemas de la industria italiana.

75 años después, el diseño del ingeniero aeronáutico e inventor Corradino D’Ascanio mantiene su vigencia y su poder de seducción. Cuenta la leyenda que D’Ascanio odiaba las motos, cuando el industrial Enrico Piaggio le encargó la creación de un vehículo de bajo costo para una europa que salía de la Guerra Mundial y cuando le enseñaron el prototipo D ́Ascanio y su ayudante, también diseñador, Mario D ́Este, Piaggio exclamó “Que bonita, parece una avispa ̈.