Proteccionismo, aquí y allá

Aunque difieren en muchos temas (destacadamente el tema verde medioambiental), Donald Trump y la diputada socialista Alexandria Ocasio-Cortez coinciden en la necesidad de impedir el ingreso a su país de productos producidos ventajosamente en el extranjero y aumentar la protección a los trabajadores estadunidenses.

Ambos se han referido recientemente a las huelgas en Matamoros, México, destacando que el salario que otorgan las maquiladoras da una ventaja “injusta” a los productos generados por esa mano de obra que compite deslealmente con el salario obrero estadunidense. Aplaudieron la lucha sindical de los trabajadores mexicanos.

Lo que movió a Trump a exigir una renegociación del TLCAN (NAFTA), que terminó convertido en el T-MEC, fue su reclamo por una relación “más justa” con México, principalmente, debido a sus bajos salarios. Canadá fue siempre un problema diferente.

La posición de Trump, con la cual coinciden Ocasio-Cortez y Bernie Sanders, es presionar a las empresas estadunidenses para que mantengan o restablezcan sus líneas de producción dentro de EU, que dejen de exportar empleos y que mejoren los salarios internos. Según Trump, el T-MEC logró precisamente eso: presionar a las cadenas de producción a que se mantengan en Estados Unidos.

¿Tendrá el T-MEC algo que ver con las huelgas en las maquiladoras en Matamoros? Es sabido que el telón de fondo en las negociaciones sobre el nuevo acuerdo trilateral era la industria automotriz y sus cadenas productivas alimentadoras. Hay, en Matamoros, maquiladoras de muchas ramas de producción. Pero destacan las maquiladoras de la producción de autopartes.

Una de esas empresas, la china (¡!) Joyson Safety Systems (JSS), que fabrica y desarrolla sistemas de seguridad para automóviles, anuncio que saldrá de Matamoros. El anunció lo hizo colocando una manta sobre su puerta principal que decía: “Matamoros: ¡Muchas Gracias! Adiós”.

El pasado 5 de febrero, trabajadores de esta maquiladora se sumaron al Movimiento 20/32  para buscar un aumento del 20% y el pago de un bono anual por productividad de 32 mil pesos. En un momento determinado había 48 maquiladoras en huelga en Matamoros. Aún hay unas 17 empresas en huelga. Existe un debate en las Juntas de Conciliación y Arbitraje acerca de la legalidad de las huelgas.

La salida de Joyson Safety Systems de Matamoros plantea otro debate. Es cierto que los salarios reales han estado disminuyendo y que es necesario frenar ese proceso. Las luchas sindicales tienen ese componente justo. Pero, ¿cuál es el método correcto para avanzar conquistas y no perder los empleos ni destruir la planta productiva? Porque ahora 800 familias en Matamoros no tendrán sustento debido al cierre de la planta.

La organización empresarial de la ciudad teme perder entre 15 mil y 25 mil empleos en los próximos tres años por luchas entre nuevos líderes por el control de los sindicatos, como entre los cárteles. No sé si es un cálculo real o quiere ser una amenaza, pero sí es necesario encontrar métodos de lucha que avancen la causa obrera sin poner en peligro su empleo. Nada más fácil para una maquiladora que irse de Matamoros, Ciudad Juárez, Nogales o Tijuana a Guatemala, Belice o Costa Rica. La empresa se lleva sus contratos, dejando atrás desempleo y devastación.

Si Estados Unidos y México profundizan su vertiente proteccionista, provocarán graves dificultades para sus poblaciones, especialmente las más vulnerables. Los gobernantes deben medir cuidadosamente sus pasos.

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