Opinión del experto adrenalina

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Primera neta: ¡verdades de a peso!

24 de Marzo de 2019

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Por Pali Plascencia*

 

Cien partidos, cientos de brillantes atajadas que nunca encontraron un club a la altura: Ochoa, un hombre en quien confiar. ¡Ochenta y nueve minutos para Rodríguez, 1 minuto para Layún! El urgente cambio generacional. Ni Vela, ni Tecatito: ¡Pizarro los borró! Cuatro goles en sus últimos 4 partidos jugados; una mentalidad ganadora: Raúl Jiménez. Pizarro y Montes, dos cerebros en la cancha que Osorio nunca encontró (o que nunca quiso ver). En todos lados mete goles. 23 años, El Chucky Lozano. Hola, Carlos Rodríguez, (genial, superior). Adiós, Jonathan Dos Santos. Tres veces campeón de liga, 3 veces campeón de campeones, el mejor lateral derecho del país, amo y señor de la banda: Luis El Chaka Rodríguez. Educado, dedicado, querido, incansable, compartido, necesario: @CH14_. Ni tinta azul ni tinta roja, simplemente usa la lógica, un conocedor en busca del quinto partido: Gerardo Martino.
 

SEGUNDA NETA: YO PENSABA

Pensaba antes de ver el partido de México vs. Chile escribir una Neta que hablara de la bronca Tata-Tecatito, pero hoy no tiene sentido publicarla. Martino, desde que llegó, lo ha dejado todo muy claro: su currículum (74% de efectividad con el Barcelona), sus auxiliares, su convocatoria, sus declaraciones, su primer partido, su lógica, su clic con la prensa, entre otras cosas, son indicadores cla-ri-tos de que no va a permitir ni pachangas ni padroteos en la selección nacional mexicana, y, si ésa en verdad es su decisión y no es sólo un diagnóstico de primera impresión, no habrá nadie que le pueda reprochar su atrevimiento e ímpetu. Si acaso algún futbolista falto de educación y/o sobrado de patrocinios que se crea inamovible y que con Osorio eran multitud.
 

NETAS EXTRAS: ¡CHICHAROTE!

Le llenó el ojo al actual entrenador mexicano; se fue muy joven de México acompañado de su familia; se hartó de meter goles en la liga que decidió pisar; tuvo, tiene y tendrá una sonrisa para cualquiera que se le acercó; respeta y respetó a sus superiores e inferiores, 50 goles con su selección nacional (el que más pepinos ha clavado) y el pasado viernes antes de entrar de cambio al minuto 74, y con una sonrisa de oreja a oreja, le dio un beso a Raúl Jiménez y se dispuso para recibir la ovación más grande de la noche. Las palabras del Tata un día antes lo pintan de cuerpo entero: “el recorrido de Javier no es el recorrido de alguien que no se ha esforzado en su vida”. Más Chicharitos para este país.

 

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