Logo de Excélsior                                                        

Rosas, momento de criticar a la madre

Imagen de la Mujer

Imagen de la Mujer

Imagen de la Mujer

Por Claudia Berenice Vergara H.

Rosa es el color generalizado en nuestra cultura para simbolizar la feminidad. Rosas, las más regaladas a la madre el 10 de mayo; la más admirada y merecedora. ¡La amamos! ¿Acaso ella, la madre, ha reparado por un segundo, desde que gestó, en que le fue concedida una misión? Miles de madres lo han sido sin querer, por condición natural, por tradición o por obligación, quisiera saber cuántas lo han sido por decisión propia, por convicción, con un objetivo y verdadero amor al ser humano que traerán al planeta.

Este siglo en el que el mundo está colapsando el ambiente, lo económico, lo social y la salud, aún se cría a las niñas para que incluyan en su proyecto de vida ser madres sin reflexionarlo, como una carta dada al haber nacido del sexo femenino.

Vamos quitándole el tono rosa a este artículo porque llega el momento de criticar a la madre.

Hay indicadores alarmantes, que parecieran imposible detener y no reparamos en éstos porque nos hemos desensibilizado. Índices de violencia altísimos en el país: narcotráfico, homicidios, feminicidios, trata de personas, violencia intrafamiliar, maltrato y abuso sexual infantil, fraudes, asaltos, robos y un doloroso etc. Indicadores preocupantes sobre problemas de salud: la pandemia de covid-19, enfermedades crónicodegenerativas, VIH, cáncer y obesidad, etc. Problemas de acoso en las escuelas y las redes sociales, maltrato a los animales y demás.

No pretendo culpar a las madres y haré algunas generalizaciones necesarias por el espacio al que debo ceñir el escrito, sin que con ello se justifiquen. La madre también ejerce violencia hacia sus hijos, educa con golpes, humilla, maltrata, marca diferencias de género, contribuye a los estereotipos de género, cuida la salud y alimenta a la familia.

Si amamos e idolatramos a la madre mexicana es porque es más cercana física y emocionalmente a los hijos que el padre. Tiene un día especial para festejarla y todo el año se nos recuerda cuánto debemos honrarla, amarla y agradecerle; cada festividad nos dice que merece el mejor regalo; cuando muere la madre llega la verdadera orfandad y ¡no hay mayor ofensa que aquella que implica a la madre!

¡Por lo que más quieras madre! Si eres lo mejor para tus hijos, si eres la encarnación del amor, la bondad y la sabiduría, entonces ¿quién ha alimentado a niños obesos?, ¿quién crió a delincuentes?, ¿quién formó al misógino y al feminicida?, ¿quién permitió que los niños al crecer se conviertan en racistas, homófobos, violentos, violadores, corruptos, ladrones, narcicistas y acosadores?

Si el reclamo social a los hombres es que están alejados de las tareas de crianza de los hijos, porque trabajan, aun cuando las madres también lo hagan, las tareas del hogar se cargan a ellas, alimentan a la familia y enseñan los valores, son guerreras y multitarea… digan ¿dónde debe recaer, no toda, sino gran parte, de la responsabilidad de la podredumbre de valores y carencia de hábitos en niños, jóvenes y millones de adultos que laceran la sociedad mexicana y el mundo?

El hombre violento tiene madre, el corrupto tiene madre; el niño obeso tiene madre, el que acosa tiene madre. El Estado tiene la responsabilidad de echar a andar políticas públicas para que todo cambie, sin embargo, es en los hogares, en el regazo de los padres y el beso de las buenas noches en donde cada niño debería ser encaminado a ser un buen humano con todos.

Madre, el ejemplo arrastra, no hago mercadotecnia para vender nada, por eso no dejaré tu conciencia inmaculada; ¿crees que eres víctima?, ¡te lo dejo de tarea y te regalo una rosa!

                                   clauberetubb@gmail.com

 

Comparte en Redes Sociales