Chuponcito

Amigos y amigas, simple y sencillamente no se pueden perder este sábado mi programa El minuto que cambió mi destino, el invitado es ni más ni menos que el gran Chuponcito, un payaso niño, de 7 años (el personaje), que le da vida un hombre sencillo, simpático, agradecido con la vida, con su familia, con una historia hermosa desde su nacimiento, la creación de su personaje, las vicisitudes que ha tenido, que han sido muchas y, por supuesto, que contará chistes. Los esperamos Chuponcito y un servidor este sábado a las 9 p.m. en Imagen Televisión, canal 3.1, les va a encantar.

*

MANUEL JOSÉ HASTA OPINA

Seguramente, la culpa es de nosotros los medios de comunicación por preguntarle a este cantante temas en donde nada tiene que ver ni opinar. Me refiero al cantante colombiano Manuel José, quien, definitivamente, es el mejor imitador del Príncipe de la Canción, incluso en su serie me dicen que él fue quien interpretó los temas de José José, pero de eso a que opine de los deseos de Anel Noreña (con quien José José procreó dos hijos, Pepe y Marysol) de que sus cenizas se pongan junto a los de José José y diga que no está de acuerdo, ¿y qué demonios si está o no de acuerdo? Es como si tomáramos la opinión de Carlitos Espejel sobre el testamento de Mario Moreno Cantinflas por el hecho de que interpretó a Carlinflas en Chiquilladas, ¿qué tiene que ver una cosa con la otra?

Lo peor del asunto es que ahora mismo ni Manuel José ni José Joel tienen trabajo por esto de la pandemia y en vez de empujar proyectos profesionales padres, cada uno de ellos se dedican a tirarse mala onda entre sí, siendo que uno es un gran cantante e imitador y el otro, su primogénito, es decir, que no confundamos la gimnasia con la magnesia.

*

LA ABUELITA MÉNDEZ

La que no cabe de contenta es Lucía Méndez, pues su único hijo, Pedro Antonio Torres Méndez y su novia, María, están esperando a su primer bebé, esto convierte a la protagonista de Diana Salazar en una futura abuelita y la verdad una abuelita muy guapa y muy delgada. La Méndez está feliz y por supuesto que le deseamos lo mejor de lo mejor a ella y a su próximo nieto o nietecita.