Ahora, “disparar” a migrantes…

Consumado un primer despliegue de algo más de cinco mil militares a lo largo de la frontera con México, el gobierno estadunidense, su desequilibrado titular, Donald Trump, endurece su mensaje respecto de la forma en que prevé enfrentar el acceso de la “caravana migrante” a su territorio pero, curiosamente, no lo hace con tal propósito sino, esencialmente, para tratar de impedir el previsible desastre de su partido, el Republicano, este martes en las elecciones de medio término.

La sola mención de que, en el supuesto caso de que —como ocurrió en nuestra frontera sur— migrantes enardecidos pudieran lanzar piedras a los agentes desplegados, éstos podrían abrir fuego en contra de ellos, constituye una amenaza explícita apoyada, según él mismo, en su compromiso de emplear “todos los recursos a mi alcance para acabar con esta crisis… Debemos acabar el trabajo que empezamos; ser duros…”, parece desproporcionado para un jefe de Estado.

Desproporcionado, sí, en condiciones normales, pero no en una situación electoral en extremo volátil y endeble como la que ahora enfrenta el controvertido mandatario norteamericano y pone en serio riesgo el control de sus afines republicanos en la Cámara de Representantes y en el Senado, en ese orden puesto que, con las más recientes previsiones, sus opositores demócratas podrían ganar entre 20 y 35 de las curules de representantes en juego, cuando requiere sólo 23 para recuperar la mayoría, si bien en lo que se refiere a posiciones senatoriales el panorama parece menos claro…

La apuesta central hoy de Trump, pues, va más allá de su solo compromiso, incumplido hasta ahora, de frenar el flujo de migrantes ilegales a territorio estadunidense y, más, de ordenar el paso de quienes pretenden establecerse de manera legal en la Unión Americana… alcanza y mira, esencialmente, al cortísimo plazo, el próximo martes 6 en que poco menos de 50% de los votantes estadunidenses, según estimaciones preliminares, irá a las urnas para, de manera implícita, ratificarle su apoyo o retirarle el mismo.

Tal es la trascendencia de los referidos comicios para el impresentable que, en el improbable caso de que los republicanos sufrieran una verdadera debacle, aquél podría incluso ser objeto de encauzamientos de los que, hasta el momento, ha sido librado, precisamente, por las mayorías legislativas ahora bajo el control de su partido.

No son sólo, pues, los migrantes ni la explícita pretensión de impedir el ingreso a Estados Unidos de algunos “duros” —criminales o prófugos de la justicia— sino, para decirlo pronto, la conservación o no del poder presidencial en condiciones “aceptables”…

ASTERISCOS

* Vaya frontal señalamiento el que, desde la tribuna del Congreso y su cuenta de Twitter también, hizo la morena Lorena Villavicencio, diputada, celebrando la reapertura del proceso de investigación que por el presunto delito de operación y control de una red de prostitución y lenocinio, abrieron autoridades en contra del exmandamás priista en la Ciudad de México, el impresentable Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre. ¡Punto a favor!...

* Concluyó octubre y el nuevo gobierno no presentó, como había ofrecido, su estrategia para recuperar la seguridad y la paz perdidas… lo hará, y ésta es una nueva fecha proporcionada por el mismísimo presidente electo, el próximo jueves 8, en el marco de un evento donde definirá también su postura sobre la despenalización, dijo, del uso (lúdico) de la mariguana…

* El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que lidera Janine Otálora, continúa cavando la tumba de su propia credibilidad. La decisión de anular la elección en Monterrey, privando del triunfo al panista Felipe de Jesús Cantú, constituyó, en el mejor de los casos, un yerro de la misma dimensión que el que representó aprobar la elección en Guadalupe…

Veámonos el domingo, con otro asunto De naturaleza política.