Logo de Excélsior                                                        

Escuela de Diseño y Artesanías busca su consolidación

Cumple medio siglo el recinto que ha formado a creadores como Francisco Toledo, Narciso Vallejo y Melquiades Herrera

Sonia Ávila | 06-08-2011

CIUDAD DE MÉXICO, 6 de agosto.- Hace 50 años, José Chávez Morado denunció la necesidad de un espacio para la profesionalización de quienes con su creatividad dan forma a los objetos. Entonces en colaboración con el Instituto Nacional de Bellas Artes, el pintor mexicano fundó la Escuela de Diseño y Artesanías, en la plaza de la Ciudadela.

Con la primera carrera profesional de Diseñador Artesanal y distintas carreras técnicas en artesanías, la escuela fue pionera en introducir el estudio del diseño en México con carácter de profesión y no oficio, recordó Berenice Miranda, directora de la Escuela.

“La Escuela de Diseño fue la primera en su especie en el país, tiene una gran presencia  en el mundo porque fue la primera, antes que la UNAM o la UAM, que ahora son competencia directa”, apuntó Miranda, quien prepara un encuentro de académicos para analizar el desarrollo del diseño nacional en los últimos 50 años.

Una de las características de la hoy Escuela de Diseño (EDINBA), es que depende directamente de las decisiones políticas y culturales del gobierno; pero lo que pareciera ser una desventaja para Miranda es un factor de distinción que mantiene a la Escuela en vanguardia con constantes reformas a su programa de estudios según las necesidades del campo laboral.

Así, explicó, en 1979 se realizó el primer ajuste al programa de estudios que separó la Escuela de Diseño y la de Artesanías; más tarde, en 1980, la EDINBA logró que se reconocieran como licenciaturas sus cuatro carreras: diseño gráfico, de muebles, de objetos y de textil.

Ya en las instalaciones de la colonia Tránsito, en los antiguos edificios del Colegio de Ingenieros que ocuparon en 1980, la carrera actualizó de nuevo su plan de estudios para crear la Licenciatura en Diseño, que juntó los estudios técnicos en una carrera profesional.

“En 1994 hubo otro proceso académico, a través de un análisis se da un giro a una licenciatura en diseño que ofrece una formación más general de estratega de diseñadores. Tenemos un proceso de vanguardia, basada en una política internacional para que diseñadores aprendan a resolver problemáticas”, explicó.

Talón de Aquiles

Para los alumnos, la EDINBA carece de un “buen” equipo tecnológico necesario para clases y talleres, como el de fotografía; además de las “pobres” condiciones de sus instalaciones.

“Tal vez su talón de Aquiles es su infraestructura por ser una escuela que depende del gobierno, recuerdo que teníamos que buscar opciones para cubrir esas necesidades, pero creo que eso sucede en todas las escuelas”, recordó Ernesto Alcántara, ex alumno de la EDINBA, que ha laborado en el diseño de periódicos de circulación nacional.

En ello coincidió Omar Ramírez, también ex alumno de la generación 1998, quien recuerda que en términos de cómputo y maquinaria para talleres tenían muchas carencias; sin embargo, el diseñador de agencias publicitarias rescató la plantilla docente.

“En tecnologías está algo atrasada pero se compensa con el nivel de los profesores, recuerdo a Melquiades Herrera, Arturo Díaz Belem, Félix Beltrán, muy buenos maestros y diseñadores”.

La EDINBA recibe cada año escolar 100 alumnos de primer ingreso, de los cuales 60 por ciento termina sus estudios, reveló Miranda, quien detalló que también cuentan con  300 alumnos de posgrado.

Su par artesanal

En las mismas instalaciones se encuentra la Escuela de Artesanías donde Francisco Toledo estudiaron grabado y Narciso Vallejo, cerámica. En el marco de su 50 aniversario, maestros y académicos de la escuela preparan una solicitud para que sus carreras se reconozcan como licenciaturas.

“La gente piensa que es una escuela de manualidades, pero somos una escuela técnica que enseña a fabricar piezas de arte, por eso estamos buscando que nos acrediten como licenciatura, esperamos que en seis meses esté listo el dictamen”, comentó Rodolfo Cisneros, director de la institución.

Para Cisneros, la escuela, con estudios en cerámica, ebanistería, esmalte, joyería, textil y vitrales, no sólo profesionaliza el arte popular mexicano, sino representa a los artesanos del país.

Visita: Expresiones

Te recomendamos

Comparte en Redes Sociales