Recibe las últimas noticias y mantente siempre informado
YUCATÁN
En Yucatán, aprovechando el boom inmobiliario de ese estado, hay desarrolladoras que buscan hacer negocios millonarios a costa de instituciones de educación públicas y del patrimonio de todos.
Podría ser el caso de la inmobiliaria Vive que busca adquirir 300 hectáreas de la Universidad Chapingo, campus Yucatán, pagando solamente 350 millones de pesos.
El tema es que el costo de mercado de dicha propiedad es de casi 9 mil millones de pesos, lo que implicaría que la referida inmobiliaria ganaría de golpe más de 8 mil millones. Un lucrativo negocio que sin duda debe ser cancelado.
El Grupo Vive Peninsular pretende adquirir 300 hectáreas del CRUPY (Universidad Chapingo) mediante la donación de 300 millones de pesos y 60 hectáreas en el municipio de Kanasin para la construcción de un nuevo campus y mayores instalaciones.
El costo de las 300 hectáreas del CRUPY (Universidad Chapingo) asciende, de acuerdo con el valor del mercado, a poco más de 9 mil millones de pesos, lo que traería una ganancia de poco más de 8 mil 500 millones de pesos.
Las autoridades de la universidad, encabezadas por Manuel Jesús Negrete Quijano, subdirector del CRUPY, no han emitido un posicionamiento claro sobre la evidente diferencia entre la donación de 300 millones y el costo de los terrenos de 9 mil millones.
Cabe destacar que algo similar se operó de la misma forma para obtener terrenos de la isla de Holbox, en sociedad con Andrés Granier en Tabasco.
En este último caso fue tal el escándalo que un socio de apellido Ponce Díaz perdió la presidencia de Bepensa, la concesionaria de Coca Cola en la península de Yucatán.
jcs