En México operan más de 200 empresas de blindaje, sin embargo, entre el 40 y 50% de estas no están certificadas ante las autoridades correspondientes, lo que pone en riesgo la seguridad e incluso la vida de sus clientes por no garantizar la calidad de su trabajo y los materiales que utilizan.
René Rivera, presidente de la Comisión de Blindaje Arquitectónico del Consejo Nacional de la Industria Balística (CNB), aseguró que esto facilita el blindaje de las unidades que utiliza el crimen organizado, pues aun cuando es posible detectar quién les hace estos trabajos y la procedencia de los materiales, la autoridad no ha tenido el interés de intervenir.
INSPECTORES
En conferencia, representantes del sector aseguraron que durante la pasada administración el gobierno contaba con 20 inspectores que verificaban la legalidad con la que operan los talleres de blindaje, sin embargo, actualmente sólo hay tres responsables, lo que ha provocado la proliferación de empresas pirata.
Es así que, en México, operan de 80 a 100 empresas fuera de la legalidad.
Se ha detectado que hay empresas nuevas, o incluso piratas que han decidido incursionar en el blindaje, pero no están actuando profesionalmente, o bien ofrecen costos menores a los reales. Aquí es donde las autoridades deben intervenir para regular los procesos y exigir que las empresas se registren debidamente ante la Dirección General de Seguridad Privada, para operar adecuadamente, porque estamos hablando de la protección de la vida”, dijo Verónica Damián, presidenta de la Comisión de Blindaje Automotriz del CNB.
Sobre los problemas que ha enfrentado la industria, Daniel Portugal, asesor de la CNB, aseguró que en los últimos meses los materiales para blindaje han registrado un aumento de hasta 40%, pues la mayoría de ellos provienen de extranjero.
Esta situación ha provocado que parte de estos costos sean trasladados a sus clientes y el resto absorbido por las empresas.
Ropa blindada
Ropa, mochilas y hasta una carriolas son candidatos para someterse a un proceso de blindaje, y que en los últimos años ha registrado un aumento importante en su demanda.
Ignacio Baca, presidente del Consejo Nacional de la Industria Balística (CNB), aseguró que una de las premisas es garantizar la seguridad corporal de sus clientes, bajo un estándar de “discreción”, es decir, que no sea notorio a simple vista que está siendo protegido.
Por ello, el sector ha buscado adaptarse a las necesidades de seguridad, por lo que ya no sólo se adaptan los chalecos antibalas, toda vez que el mercado ha comenzado a demandar otro tipo de artículos, los cuales van desde una mochila hasta una guayabera.
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*mcam
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