El Congreso produjo más en confinamiento; teletrabajo, una asignatura pendiente

CIUDAD DE MÉXICO.

A pesar del confinamiento y la ausencia de una legislación que le permitiera continuar resolviendo sus tareas vía remota, el Congreso mexicano logró mayores niveles de productividad en comparación con años anteriores.

El director de la Iniciativa Buró Parlamentario, Sergio Bárcena Juárez, plantea que entre febrero y julio los
diputados presentaron mil 466 iniciativas y mil 50 proposiciones con punto de acuerdo, un incremento del 50% y 30%, respectivamente, con respecto al 2019.

“Los legisladores no detuvieron su productividad”, subraya el académico de la Escuela de Humanidades y Educación del Tecnológico de Monterrey.

Destaca el también integrante del Sistema Nacional de Investigadores que en el segundo año se produjeron nueve grandes reformas, el mismo número que el año anterior. “La pandemia no redujo la producción de reformas importantes en la Cámara de Diputados: modificaciones en educación, el etiquetado de alimentos, leyes de austeridad republicana y las de paridad de género, la ley de transparencia para conocer el contenido de las sentencias de la Suprema Corte”, enumeró Bárcena Juárez.

Para el fundador de Buró Parlamentario, otro dato que marca el quehacer legislativo durante la contingencia es que las comisiones de la Cámara realizaron 164 reuniones virtuales y en éstas se produjeron 144 predictámenes.

Bárcena Juárez también subraya el hecho de que la construcción de acuerdos y negociaciones sigue vigente, “como síntoma de la democracia pluralista mexicana”. 

Por su parte, Israel Tello Ortiz, de Integralia Consultores, considera relevante la aprobación en el Senado de 53 dictámenes en los periodos extraordinarios, realizados a lo largo del receso legislativo entre mayo y agosto, destacando todos los ordenamientos del T-MEC, instrumento clave para la recuperación económica.

Y, en el caso de la Cámara de Diputados, esta vez hubo 24 dictámenes que salieron adelante en sus tres periodos extraordinarios, en comparación con los 11 que se aprobaron el año anterior.

“El balance es bueno. Pero no hubo ningún intento por formular una ley de recuperación nacional que sumara las diversas propuestas que hubo ante los estragos de la pandemia, incluyendo las varias iniciativas a favor de un ingreso básico vital”, lamenta el director de Análisis Legislativo y Regulatorio de Integralia.

“Tampoco se sacó adelante una ley sobre el teletrabajo ni hubo medidas concretas para atender el crecimiento de las violencias contra las mujeres. Y no se puede generar empatía con los electores con puros puntos de acuerdo”, critica Tello Ortiz.

Si haces click en la siguiente imagen puedes visitar nuestra sección de última hora.