Comparecencias se convierten en festejo; en Veracruz, acarrean para que aplaudan

XALAPA.

Con violaciones al reglamento interno del Poder Legislativo se llevaron a cabo las comparecencias de los secretarios de despacho del Poder Ejecutivo para la glosa del Cuarto Informe de Gobierno ante la complacencia de los diputados de mayoría morenista.

Acarreo, porras, festivales y aplausos durante las intervenciones de los funcionarios evidenciaron el despliegue de recursos humanos de las dependencias para acudir a lo que tendría que ser sólo un ejercicio de rendición de cuentas.

Durante la administración del exgobernador Javier Duarte, de 2010 a 2016, el dispendio de las comparecencias era duramente criticado ante las notables necesidades y desvíos de recursos.

Para contrarrestar los reclamos, los secretarios de despacho optaban por el “acarreo” para que simulara una falsa óptica de buena administración y afuera del Palacio Legislativo montaban escenarios con grupos musicales, servían taquiza, refrescos, tamales y armaban la verbena.

En 2016, la 64 Legislatura, que ya era integrada por diputados del partido Morena, exigió comparecencias austeras y por unanimidad aprobaron reformas al reglamento interno del Poder Legislativo, que contemplaron que el funcionario en turno sólo llevara a 20 auxiliares y que de esta manera evitaran el culto a la personalidad.

Además, se abstendrán de realizar directa o indirectamente actos multitudinarios dentro o fuera de la  sede del Poder Legislativo.

Sin embargo, durante la comparecencia de los funcionarios de la presente administración, la sala de sesiones lució abarrotada y las intervenciones eran aplaudidas, principalmente cuando las respuestas aludían al tema político y respondían a los diputados de oposición. A pesar de que la facultad de los presidentes de cada comisión era la de poner orden, no la hubo.

El 19 de noviembre compareció el secretario de Gobierno, Patrocinio Cisneros, se realizó un festival étnico.

La comparecencia del secretario de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Zúñiga, coincidía con el horario del partido de la Selección Mexicana contra Polonia, por lo que el presidente de la Jucopo en el Congreso local optó por aplazar la hora del inicio de esta ceremonia y se dispuso junto con el funcionario a ver el partido. 

Cada funcionario llevó a los trabajadores de su dependencia y los testimonios de que fueron obligados a dejar sus labores para acudir a la sala de sesiones se multiplicaron. 

Para diputados y analistas, las comparecencias sólo han servido como pasarela y antesala para que los actuales funcionarios vayan en pos de un cargo de elección popular.

El pasado viernes, durante la comparecencia del secretario de Educación, Zenyazen Escobar, se observó un despliegue de autobuses que trasladaron profesores y alumnos de los institutos tecnológicos para que acudieran a aplaudir en el interior del recinto.

La comparecencia duró cinco horas, en las cuales los diputados pasaron a agradecer, a elogiar y a solicitar aulas y salones para sus distritos. La rendición de cuentas se convirtió en una sala de gestiones.