Sin importar el cansancio, los cinco mil migrantes siguieron su camino y dejaron hoy Tapachula.
No pasaron ni 24 horas de la caminata de 28 kilómetros y hoy fueron por 33 más para llegar al municipio de Huixtla.
No todos caminaron. Algunos pidieron aventón y permiso para subirse a los carros de volteo, a camionetas, tráileres o pipas.
Pero el clima fue implacable… El termómetro marcó 30 grados.
Y otra vez aparecieron los solidarios, regalando agua y comida para hacer menos pesado el camino.
Avanzaba la tarde, y ocurrió el primer deceso confirmado de la caravana. Un migrante de unos 25 años cayó cuando resbaló del camión que lo llevaba... Murió al instante.
Después del incidente, los policías federales pidieron a todos los migrantes que se bajaran de los camiones. Desde ese punto, todavía faltaban 20 kilómetros por llegar.
Y ahora se tenían que hacer a pie.
El sol no daba tregua.
El cansancio obligó a los migrantes a separarse, muchos se detenían a descansar, a mirar a sus compañeros. A solo verlos pasar.
Los primeros en llegar a su destino fueron las mujeres y los niños, ellos tuvieron preferencia para el transporte
El calor, la caminata, el cansancio, provocaron crisis nerviosas, a pesar de que el viaje apenas comienza.
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