Reviven charlas de Carlos Fuentes; A viva voz

CIUDAD DE MÉXICO.

“Sus conferencias eran pequeñas obras de arte”, comenta Silvia Lemus, viuda del escritor mexicano Carlos Fuentes (1928-2012), sobre las charlas que el Premio Cervantes 1987 dio en universidades y centros culturales de diversos países, de las cuales 13 se publican por primera vez en formato de libro en A viva voz (Alfaguara).

En entrevista con Excélsior, la periodista afirma que el narrador con quien vivió durante 40 años, desde 1972, era “un conferenciante natural; él pensaba el tema, lo analizaba, lo escribía, le dedicaba todo el tiempo para que quedara lo mejor posible”.

Agrega que el novelista “hubiera podido ofrecer sus conferencias sin tener un papel delante, y a veces eso impresiona más al escucha; pero creo que escribir una charla es darle aún más importancia al público, les entregaba una creación literaria”.

Añade que el autor de La región más transparente, Aura y Cristóbal Nonato fue “un hombre vital entregado a la palabra, su amor por la palabra lo llevó a ser un escritor universal”.

Recuerda cómo el ensayista subía siempre al podio de un salto atlético. “Era un gran seductor de mujeres y de hombres de todas las edades. Cuando daba una conferencia, yo veía cómo las personas se emocionaban cuando aparecía. Él tenía muy buen humor y eso amenizaba las charlas”.

En su casa de San Jerónimo Lídice, hogar que la familia Fuentes alternaba con su departamento de Londres, Lemus destaca que escogió A viva voz como título para este volumen de conferencias culturales y literarias  porque desea que los lectores, al adentrarse en ellas, lo escuchen.

Quiero que sientan que es la viva voz de Carlos. Me parece que estas conferencias son magníficas. Fueron muy apreciadas por quienes las escucharon; ¿por qué dejarlas en el archivo?”, indica.

Con una Nota Introductoria del académico británico Steven Boldy, de la Universidad de Cambridge, A viva voz integra las charlas en tres apartados: Maestros, Amigos y Vocación; la más antigua la dictó en El Colegio Nacional el 2 de septiembre de 1982, y la más reciente, Cien años con Fernando Benítez, en el Palacio de Bellas Artes, el 18 de diciembre de 2011. Ambas en la Ciudad de México.

En el título que muestra en la portada una fotografía en blanco y negro de Fuentes recién mudado a su departamento londinense –en la que se le ve de perfil, reflexionando rodeado de libros–, el autor narra cómo influyeron en su obra maestros como el francés Honoré de Balzac, el estadunidense William Faulkner y el español Miguel de Cervantes; así como sus vivencias con amigos como el poeta mexicano Octavio Paz, el narrador argentino Julio Cortázar y el cineasta español Luis Buñuel, entre otros.

Destaca la sección Vocación, dedicada a los jóvenes escritores, a quienes entrega un decálogo de consejos, entre los que recomienda disciplina y lectura voraz.

AMISTAD Y LEALTAD

En una sala rodeada de retratos de Fuentes y de los dos hijos que tuvieron, Carlos y Natasha, así como del cuadro hecho en París por el pintor Armando Morales, en el que se ve al escritor sonriendo, Lemus detalla que “era un hombre muy querido y él quería mucho a sus amigos.

Conservaba, incluso, amigos que tuvo desde niño. Cuando voy a Chile, en Santiago, aún le aguarda un amigo de la secundaria. También apreciaba a los de la universidad y de la Generación del Medio Siglo, como Porfirio Muñoz Ledo, Víctor Flores Olea y Enrique González Pedrero. Fueron amistades que guardó a lo largo de su vida”, apunta.

Entre las amistades de Fuentes, la autora de Tratos y retratos menciona de manera especial a Paz, quien inspiró la conferencia Mi amigo Octavio Paz, dictada en Londres el 5 de mayo de 1998, año en que murió el Nobel de Literatura. Aquí, Fuentes cuenta que lo conoció en París, en abril de 1950, “cuando yo tenía 21 años y él 35”; y alude a las “más de mil cartas intercambiadas a lo largo de tres décadas”.

Silvia explica que espera poder retomar pronto la publicación de estas misivas. “Marie-José Paz (viuda del poeta) y yo hablamos sobre la posibilidad de darlas a conocer; pero vino su fallecimiento y el problema de la herencia, pues no había testamento”.

Menciona que está pendiente dar a conocer las cartas de Fuentes con otros escritores. “Sus amigos realmente deseaban encontrarlo para hablar de todo aquello que les interesaba, política y culturalmente”.

Adelanta que prepara un título que integrará los escritos periodísticos del también dramaturgo, y que es muy probable que salga un tercer tomo de conferencias.

Finalmente, Lemus cuenta que existe el proyecto de que un libro de Fuentes se integre a la lista de los 21 títulos con los que el gobierno busca conmemorar los 500 años de la Conquista de México.

Hace unos diez días vino a verme Paco Ignacio Taibo II, director del Fondo de Cultura Económica, y me habló de este proyecto del presidente López Obrador. Pero no mencionó a La región más transparente, como se había dicho, sino al libro de relatos El naranjo. Destacó que se tirarían como cien mil ejemplares. En eso estoy”, concluye.