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Expresiones

Reivindicar las ausencias: Eduardo Sacheri (1967)

El escritor argentino rinde homenaje a las personas que lo marcaron, con cuyos “pedazos” da vida a un personaje

VIRGINIA BAUTISTA | 30-07-2021
Reivindicar las ausencias: Eduardo Sacheri (1967)

CIUDAD DE MÉXICO.

El escritor argentino Eduardo Sacheri (1967) descubrió “cómo se va imponiendo la verdadera soledad” durante el viaje que realizó por la Patagonia para ambientar su novela más reciente, El funcionamiento general del mundo (Alfaguara).

“Es un territorio casi desierto. Es la parte menos poblada del país. Son cientos de kilómetros de una estepa muy diferente a la zona ganadera, verde y fértil. Enfrentas las distancias, la ausencia de personas, el frío, el viento, una naturaleza hostil”, afirma el narrador en entrevista con Excélsior.

A través de esta región, ubicada en el extremo sur de Sudamérica, viaja el protagonista de la novela, Federico Benítez, y sus dos hijos adolescentes, en “una especie de cápsula, abrigados por el calor del automóvil, mientras escuchan una sorprendente confesión de su padre, quien rompe el silencio sobre su pasado”.

El autor de La pregunta de sus ojos (2005), cuya adaptación al cine ganó en 2010 el Oscar a la Mejor Película Extranjera, dirigida por Juan José Campanella, recrea en su reciente entrega el choque de generaciones, la figura del padre y el autoritarismo que permea en la sociedad; pero también sentimientos como la gratitud y la lealtad, y además retoma al futbol, tema que ha marcado su literatura, como reflejo de la vida.

En cuatro días de viaje a la lejana Patagonia, llegando a ciudades como Bariloche y Comodoro Rivadavia, el hombre ensimismado y torpe les cuenta a los jóvenes la historia oculta de su
desangelada adolescencia y, en espacial, sobre un torneo regional de futbol, que jugó en 1983, el cual cambió su vida.

“La novela podía estar ambientada sólo en 1983 y quedarse con el Benítez de 15 años. Pero me interesaba también pensar en esa dimensión de secreto u ocultamiento que a veces las personas le damos al pasado. No todos deseamos contar nuestro pasado, contárnoslo a nosotros mismos; hay una decisión de silencio, tal vez pensando que duele menos si nadie lo sabe.

“Por eso quise incluir un presente en el que Benítez se ve obligado, a su pesar, a abrirse con sus hijos y a narrarse. Él planeaba seguir en silencio y, si no hubiese surgido un viaje intempestivo, continuaría así”, explica.

El Premio Alfaguara de Novela 2016, por La noche de la Usina, no intenta desmitificar la figura del padre. “Más que un mito, esos chicos tienen de su progenitor un silencio, un desconocimiento, un vacío, un agujero negro, no saben quién es. La línea del presente de la novela tiene que ver con que los hijos descubren que su padre tiene una historia detrás y que ésta explica su manera de actuar”.

El licenciado en Historia y guionista hurga en el choque de generaciones. “Mi doble experiencia, de padre y profesor de colegio secundario, me pone en ese estimulante desafío. Tendemos a pensar que el mundo normal es el nuestro, que lo ‘natural’ es nuestro modo de actuar, sentir y expresarnos. Y a veces me causa gracia, a mis 53 años, encontrarme con adolescentes que piensan que el mundo nació con ellos”.

El también cuentista cuestiona, además de las relaciones interpersonales, las sociales. “Crecí en la Argentina de la dictadura en decadencia, como mi protagonista, y creo que fue lenta nuestra adaptación a la democracia. Todos éramos autoritarios, porque estábamos habituados a vivir así.

“Nos tratábamos de un modo poco respetuoso, imponíamos en lugar de negociar, había prepotencia física. La novela busca advertir esto. Un problema que aún persiste en América Latina es que nos cuesta trabajo tener una convivencia democrática”, destaca.

Sacheri rinde un homenaje a sus seres queridos reencarnados en la maestra de dibujo Muzopappa. “Cuando uno va envejeciendo, la memoria va haciendo justicia a esas personas decisivas. Tal vez esa profesora es como un Frankenstein luminoso, porque está construida con pedazos de gente que ha sido estimulante para mí, afectuosa, desafiante”.

Quien sigue jugando futbol de mediocampista central, “no a partir del talento, sino de la constancia”, concluye que le gustaría que El funcionamiento general del mundo sea llevada a la pantalla grande. “Es algo que yo no voy a buscar, pero estoy abierto”.

Conócelo

  • Es autor de La pregunta de sus ojos (2005) cuya adaptación al cine ganó el Óscar a mejor película extranjera en 2010.
  • Un personaje recurrente en la literatura de Sacheri es el futbol, deporte que, a sus 53 años, aún practica.
  • Ganó el Premio Alfaguara de Novela en 2016 por La noche de Usina.Aurora Zepeda

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