A la caza del óleo perdido de Diego Rivera

Hallan en España un óleo atribuido a Diego Rivera (1886-1957), pintado en 1956, conocido como Ángela en el sofá, aunque, de acuerdo con una reciente investigación, se trataría del Desnudo de Juleen Compton, pieza que ha permanecido sin ubicar, en colecciones privadas, y que estaría vinculada con un óleo que recibió el Museo Nacional de Arte (Munal) en 2019, aunque a simple vista no parecieran relacionarse.

Sin embargo, de acuerdo con la indagación de una galería española dirigida por Pilar Sánchez, la pieza ha permanecido fuera de circulación y su paradero se convirtió en un enigma hasta hoy que sale a la luz.

Lo que se sabe es que ésta llegó a manos de Ana Sofía Cinta, agregada cultural de Cuba en México, en 1957, quien la trasladó a la isla y la depositó en el Museo Nacional de Bellas Artes, de Cuba, con el título Ángela en el sofá.

En aquel momento, dice a Excélsior la galerista, Roberto Dobouchet Peláez, curador del recinto, certificó la donación y su procedencia, para luego incluirlo en una muestra que se realizó en homenaje a Diego Rivera, en diciembre de 1957, a un mes de que falleciera el muralista.

Aquella muestra, según consta en la documentación mostrada a este diario, fue realizada en el citado museo, junto con 17 obras más del artista, como El poeta, El progreso, Agricultor, Paseo por Xochimilco, Retrato de Frida, Vendedora de maíz y En el mercado, por citar algunas.

Se desconoce el tiempo que el cuadro permaneció expuesto, pero en 2004 éste fue vendido a un coleccionista español, junto con 200 obras más.

“Sabemos que las piezas estaban muy deterioradas en Cuba y que, en 2004, fueron vendidas a un coleccionista, quien tenía relaciones y compromisos de tipo empresarial en la zona, así que compró más de 200 cuadros, entre los que había obra de Picasso y de Frida Kahlo”, revela.

Sin embargo, el primer comprador lo vendió al actual propietario (cuyo nombre se pidió reservar), “quien llegó a nosotros pidiendo una valoración de la pieza para ver si era una copia o confirmar su autenticidad.

“Así que realizamos una investigación técnica, bibliográfica, un examen visual, el estudio de su firma y levantamiento fotográfico”, detalló la galerista Pilar Sánchez, “hasta que leímos sobre la donación del Retrato de Miss Juleen Compton, que ella misma donó al Munal.

Y aunque la pieza llegó con el título Ángela en el sofá, “luego de analizarla nos percatamos de que la figura es prácticamente la misma, sus rasgos son parecidos y nos sugiere que se trata de ese desnudo que refiere aquella noticia”, comenta.

Otro dato que la galerista cita como parte de la investigación realizada es que, en la parte trasera del cuadro, tiene dos sellos: uno de color blanco del Registro Nacional de Bienes Culturales, de Cuba, de 2004; y otro de color azul con la mención: Permiso Especial Consulado de Estado Ministerio de Cultura.

“Nosotros creemos que no le gustó el cuadro a la actriz y que le pidió a Diego que le hiciese otro, lógicamente vestida, aunque eso tendría que preguntarse a Juleen Compton.

“Hablamos de una época complicada para lucir desnudos, pero estamos prácticamente seguros de que le hizo un retrato que a ella no le terminó de gustar”, asevera.

Y agrega: “Es probable que Rivera apartara aquel cuadro y que no lo concluyera, porque faltan algunos detalles. Sin embargo, tiene un valor importante por ser un cuadro hecho en la última etapa de su vida y porque no se sabía dónde estaba este retrato”.

¿Se consideró que esta pieza no fuera de Rivera?, se le cuestiona.  “Notamos que tenía una paleta de colores poco usual en Rivera. Sin embargo, hemos seguido una línea de trabajo por meses, y creemos que es correcta y adecuada la atribución”.

Finalmente, la galerista detalla que el propietario venderá la obra, valuada en un millón 80 mil euros (cerca de 21 mdp) y que el próximo 20 de octubre la exhibirán con otras piezas de Picasso y Kahlo en la Galería Dauro, en Granada, España.

Buscarían el desnudo

El 20 de diciembre de 2019, la actriz estadunidense Juleen Compton donó al Munal el óleo sobre tela Retrato de Miss Juleen Compton, realizado por Rivera en 1956.

La obra se encontraba en la colección privada de la modelo, cineasta y actriz, y de su esposo (Nicholas Wentworth), quienes acudieron a entregar la pieza a Carmen Gaitán, directora de dicho recinto.

En aquella ocasión, Gaitán resaltó que una de las virtudes de la pieza es que en su reverso se descubrió el boceto de una obra de Rivera que da cuenta de su estancia en Rusia: Suburbios en Moscú; y destacó que en algún momento se expondrían ambas piezas “junto con otro retrato de Compton, realizado por Rivera, un desnudo que el Munal buscará exhibir junto con Suburbios en Moscú”.

Por aquellos días, y luego de los tratamientos recibidos en el Hospital Botkin de Moscú, Rivera volvió de Rusia para instalarse en Acapulco, con la finalidad de buscar el mejor escenario para recuperarse de un cáncer.

Juan Carlos Talavera