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Expresiones

Conoce a los Booktubers, los nuevos críticos literarios en línea

Son jóvenes y aman tanto la lectura, que videograban sus opiniones sobre libros, las suben a la red y ganan miles de impactos

María Fernanda Navarro | 01-10-2014

CIUDAD DE MÉXICO, 10. de octubre.- Se les conoce como booktubers y podrían ser los nuevos críticos literarios... o al menos de su generación.

La mayoría de ellos no es mayor a 25 años, pero frente a una cámara y en la soledad de sus recamaras, están dando un giro a la divulgación literaria en varias partes del mundo, desde el portal de videos de YouTube.

Una pared tapizada con recortes y fotografías sirve de fondo a los videos que sube a la red Fátima Orozco, mejor conocida como Fa, en los que hace reseñas y comenta impresiones de las novelas que lee, con una actitud desenfadada, como quien habla de sus lecturas favoritas frente a un grupo de amigos.

Fa es pionera en México en adoptar el concepto booktube, o la elaboración de videos que publican jóvenes en YouTube en los que reseñan y analizan la trama de un libro; de ahí el adjetivo anglosajón con el que se les conoce.

La producción de esta veinteañera radicada en Monterrey, Nuevo León, es sencilla. Ella confiesa que se videograba a sí misma y después edita ese material que no dura más de 12 minutos, pero alcanzan de 20 mil hasta 115 mil reproducciones.

Sagas anglosajonas de gran éxito como Juegos del Hambre, Crepúsculo, Divergente o famosos títulos como Bajo la misma estrella, de John Green (1977), y Las ventajas de ser invisible, de Stephen Chbosky (1970), son las reseñas más repetidas entre los booktubers, que clasifican dentro del género del “Young Adult”.

Fa estudia literatura y dice en entrevista telefónica que, por su carrera, la mayoría de textos que lee son ensayos, pero su género favorito es lo que ella llama el “Young Adult Puro”, y lo describe como “esas historias centradas en un chico y una chica que están en la prepa, pero tiene una gran problemática”.

Fa cuenta que todo empezó cuando navegaba en internet y encontró un video de una chica holandesa radicada en Londres de nombre Sanne, cuyo canal de YouTube, booksandquills, alcanza ya 66 mil suscriptores y sus casi 400 grabaciones se han visto más de tres millones 900 veces.  Justamente en Reino Unido es en donde nació este concepto en el que cada minuto aparecen nuevos booktubers.

El concepto me encantó y estuve durante un año pensando en hacerlo. Una noche decidí que me iba a grabar.  Ni siquiera quería tener una conversación, quería hablar, quería dar mi opinión. Una mañana subí (el primer video) y en la noche vi que tenía 80 visitas; para ser alguien que hace su primer video es bastante grande. Me impresionó mucho y hasta el día de hoy me impresiona”, explica la dueña del canal “laspalabrasdefa”, que tiene más de 56 mil suscriptores.

La aparición de estos contenidos en la red es parte de una tendencia entre los nacidos a finales de la década de 1980 y durante 1990, quienes están dejando de lado el consumo de información a través de medios de comunicación tradicionales y están en las redes sociales para elegir y diseñar lo que quieren consumir.

Nosotros estamos acostumbrados que el internet no es como la televisión que controla  cien por ciento lo que haces; estamos más acostumbrados a decir: ‘yo hago lo que quiero y como lo quiero hacer’, y simplemente digo lo que yo pienso”, cuenta Fa.

Además de ella, en México existe una red cada vez más extensa de booktubers que hacen estos contenidos e interactúan con la comunidad de lectores en ese espacio. Entre los más famosos se encuentra Mariana González, también de Monterrey, Nuevo León, quien cuenta con 25 años de edad.

Mariana, que cursó una licenciatura en mercadotecnia, cuenta a este rotativo vía telefónica que su video más popular tiene 27 mil reproducciones, y pese a que ha adquirido popularidad por las reseñas de libros que graba para YouTube confiesa que el hábito de leer se formó bajo la influencia de su mejor amiga.

En mi casa no había libros, sólo enciclopedias y no las leemos mucho. Pero creo que lo que me impulsó fue que cuando estaba chica y vi la película Matilda; como (a la protagonista) le hacían feliz los libros, yo dije: ‘también quiero leer’, y así empecé a hacerlo. Luego pasé por una etapa en la adolescencia, en la que no tenía gente que me dijera ‘lee este libro’ y abandoné la lectura, pero a los 18 años mi mejor amiga me motivó a seguir haciéndolo”, explica la propietaria del canal “IAMUNBROKENGIRL”.

Cinco semanas en globo, de Julio Verne (1828-1905), fue el libro que estimuló su apetito de lectura, y considera que sus vídeos no sólo se enfocan en literatura “de moda”: “tengo un video de 1984, de George Orwell (1903-1950), y Matar a un ruiseñor, de Harper Lee (1926). Sí me aviento libros de clásicos, que son los que más me gustan”.

Para ella “compartir” las emociones que le provocan los libros en YouTube cada semana es una forma de dejar el aislamiento que “sufren algunos lectores”: “Es increíble ver que no eres la única a la que le apasiona la lectura. Recibo comentarios acerca de que estamos motivando a las personas a leer, pero yo creo que ellos nos motivan a seguir leyendo. Siento que ahora están viendo que leer está cool, que ya no es aburrido. Estamos cambiando”.

Con este pensamiento coincide Antonio Miranda quien adquirió fama con el sobrenombre de Tonny Beth: “El impacto de los booktubers se debe a que en este momento los lectores somos más sociables. Tenemos el estigma de que la gente no lee y que el lector es visto como una persona rara, aislada, y ahora leer es algo que está de moda o bien visto entre los jóvenes”.

Tonny, quien vive en el Distrito Federal, fue invitado a la Feria Internacional del Libro en Oaxaca el año pasado a impartir el taller Jóvenes lectores en internet. Leer y Conversar sobre Libros en YouTube: “Fue dirigido a jóvenes que estaban interesados en hacer videos y les enseñamos a hacer reseñas, enseñamos en qué se podían fijar a la hora de leer un libro, cómo leer más a profundidad, a grabar y consejos para mejorar el habla”.

La creciente fama de estos tres blogueros —además de chicos como Raiza Revelles, Gerardo Ramírez y Alberto Villarreal, que cuentan con grandes cantidades de seguidores—, ha provocado que día a día miles de jóvenes se unan a las filas de los que participan en YouTube con diversas actividades enfocados en la reseña y crítica de libros.

Este joven que cursa la licenciatura de Filosofía en la UNAM también asistió a una conferencia en la Biblioteca José Vasconcelos, en la Ciudad de México,  junto con otros famosos booktubers, y la FIL de Guadalajara.

Tonny destaca que ha formado una especie de diálogo con los usuarios que frecuentan sus videos en los espacios destinados en YouTube para comentar: “A veces ellos también nos recomiendan libros o señalan detalles que no mencionamos en las reseñas, la respuestas siempre son positivas y creo que es porque los videos los ven personas que les interesa”.

¿Los nuevos especialistas?

Los autoproducidos jóvenes se han convertido en una referencia entre los lectores mexicanos, situación que no pasó desapercibida para la industria editorial mexicana, y sellos como Planeta ya elevaron a los chicos al nivel de “columnistas” o “periodistas” que trabajan en reseñas de libros, enviándoles mensualmente sus novedades.

Myriam Vidriales, directora de comunicación y marketing de Planeta, explica que la forma en que los booktubers encontraron de comunicarse con otros lectores resulta “oro puro” en un país en donde existen muy pocos espacios para llevar a cabo esta actividad.

“Estos chavos encontraron una vía que, además, fue legitimada por la propia comunidad de lectores (…) cuando ellos adoptan un libro nuestro, siempre ha sido con resultados extraordinarios, porque tienen un nivel de credibilidad elevado”, comentó en entrevista telefónica.

Vidriales definió al sector de jóvenes lectores en México como “apasionados” y dijo que la experiencia en términos personales le permitió reconectarse con ese adolescente que todo lector fue alguna vez: “Estás apasionado, entregado a tus temas; si te gusta un autor, lees todos sus libros. Creo que es un sector de público al que los medios tradicionales no atienden”.

En eso coincide Fa, quien desea trabajar en la industria editorial cuando termine su carrera. La regiomontana comenta que incluso en las ferias de libros hay talleres para niños, pero no espacios para jóvenes: “Las ferias se están dando cuenta de que los chavos leemos, no es que México no sea un país de lectores, simplemente estamos escondidos”.

 

Booktubers, mediadores literarios

Mientras la crítica académica, periodística o especializada en literatura pierde influencia entre las personas que gustan de leer sobre todo en los jóvenes lectores, los booktubers se han convertido en una especie de mediadores literarios, considera el escritor y divulgador literario Juan Domingo Argüelles.

En entrevista telefónica, Argüelles señala que sin que nadie les haya concedido esta legitimidad —porque no la necesitan—, estos jóvenes “han conseguido ampliar el universo de lectores a partir de los ejercicios que están haciendo en las redes sociales” y un tipo de difusión literaria que sí ha prevalecido: “el boca a boca”.

“Lo que ellos están experimentando es el placer de leer, eso para mí es lo fundamental de este fenómeno, en donde lo que abunda es la necesidad de comunicar y compartir aquello que se está leyendo y no hay una definición mejor de un lector de aquel que comparte con otros su placer de leer”, explica.

El autor de ¿Qué leen los que no leen? (Paidós, 2003) comenta que a diferencia de los mediadores o preceptores convencionales, estos jóvenes comparten un código común con las personas que los observan en un momento en que “el Estado, el gobierno y las instituciones oficiales han perdido de vista qué es un lector y han querido conformar a uno desde la perspectiva disciplinaria y dogmática”.

Agrega que estas instituciones “han perdido de vista que los lectores son diferentes, no podemos seguir insistiendo en una imagen de lector decimonónico, que nada tiene que ver con el lector actual y que esa falta de visión es lo que han impedido que los programas de lectura progresen”.

En este mismo sentido, Argüelles afirma que, contrario a posturas dogmáticas que censuran las prácticas de lectura de los jóvenes, le parece importante que asuman con gran vitalidad aquello que les gusta y expresan seguridad para aquello que les disgusta.

El divulgador dice que famosas sagas como las de Harry Potter, de J.K. Rowling, (1965) o Hush Hush, de Becca Fitzpatrick (1979), en muchas ocasiones encaminan al lector hacia autores más exigentes y profundos.

Sin embargo, dice que uno de los grandes errores de programas que buscan acercar a la lectura a niños y jóvenes es encasillar sus opciones a aquello que “deben leer” y no atender lo que a ellos les interesa.

“Creo que todos los lectores comienzan con aquello que les es accesible. Las prácticas de lectura deben de ser evolutivas; ningún joven, ningún niño comienza leyendo a Kant, continúa con Goethe y termina con los grandes autores de las obras inmortales.”

El divulgador asegura que sería un grave error desdeñar el fenómeno de los booktubers únicamente
“porque los muchachos no están leyendo los libros clásicos que queremos que lean”, y afirma que el futuro de la lectura está en la práctica de “leer por leer”, justo como ha anunciado el especialista italiano Armando Petrucci (1932).

Te dejamos algunos de los enlaces de Booktubers:

 
 
 
 
 
 

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