'Vi mi vida pasar': mujer policía que frustró secuestro en CDMX

CIUDAD DE MÉXICO.

Ana Laura Martínez Villavicencio, policía segundo, recuerda que en esos instantes que se enfrentó con un secuestrador a un poco más de un metro de distancia e intentó dispararle a quemarropa, pero su arma quedó embalada, experimentó la sensación de que toda su vida era recorrida en segundos.

Ella no falló, disparó en tres ocasiones y después de una persecución, el delincuente se desvaneció.

Esta joven de figura esbelta, con 24 años de edad y con casi tres de ser agente de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina relató a Excélsior que la tarde 17 de agosto en el cruce de Eduardo Molina y Circuito Interior, el cual vigila desde hace una semana durante 12 horas al día por ser un foco rojo de asalto a transeúnte.

Un compañero de tránsito pidió su apoyo, luego de que una camioneta se diera una vuelta prohibida y con ello detectaran un secuestro.

Recordó que en el vehículo viajaban dos sujetos, uno de ellos bajo de la camioneta y dialogaba con su compañero, de repente se escucha un señor que dice con voz ahogada: ¡Ayúdenme, me tienen secuestrado!”, entonces se abre la puerta trasera de la camioneta, agregó la uniformada y observó cómo un hombre tatuado llevaba ahorcando a su víctima de 55 años.

Dan ascenso y reconocen a mujer policía que frustró secuestro

El sujeto dijo que era su suegro y lo iba a llevar a anexar. Sospecho, porque el sujeto de atrás estaba todo tatuado y cómo traía al señor, lo traía ahorcando, no lo dejaba que se parara. Cómo lo vas a llevar a anexar, dónde está su familia, dónde está su esposa o sus hijas”, cuestionó la agente de la SSP.

El compañero de Ana Laura le pidió que lo constatara, que comprobara que el hombre sometido estaba alcoholizado, en ese momento, la mujer policía observó que el agresor buscaba con una mano algo sobre el piso del vehículo.

La mujer solicita apoyo en segundos suena una sirena, el conductor de la camioneta huye sobre la banqueta sobre Eduardo Molina y el policía de tránsito inició una persecución, ella rodea la camioneta y se encuentra con el sujeto que custodiaba al secuestrado.

Él ya me estaba apuntándome, rápido desenfundé mi arma. Todo fue rápido… Vi mi vida pasar, pensé en mi familia, en mi hijo, sentí moría. Repelí la agresión, no sé por qué no le salió el tiro, pero ahí está el resultado”, con la mirada llena de emoción dijo que todo esto sucedió a una distancia de metro y medio de ese hombre que quiso atentar contra su vida.

sarr