Con ceniza en bolsa y misas grabadas, así vive Edomex el 'Miércoles de Ceniza'

ESTADO DE MÉXICO.

Con iglesias cerradas, misas grabadas y con ceniza para llevar, vivieron los feligreses el miércoles de ceniza en el Estado de México.

“Vine a tomar ceniza pero está cerrado, al parecer no hay; que no hay servicio, ya van como tres iglesias o cuatro que voy y están cerradas y no hay servicio, que está cerrado por la pandemia y no pueden dar servicio”, comentó Claudia Rodríguez, vecina de Chalco.

En las pocas iglesias abiertas de la Diócesis de Valle de Chalco, la ceniza se colocó en la cabeza, con la finalidad de evitar más contagios por la pandemia por covid-19

“Ahora nos dan la ceniza por medio de la cabeza y nos dan polvos para echarlo en familia y rezar lo que dice ahí, en una bolsita un polvito negro que es la ceniza”, comentó Dolores García, vecina de Nezahualcóyotl

Por medida sanitaria y para prevenir algún contagio, por esta ocasión la ceniza se va a distribuir en lo que es la parte de la cabeza y no en la frente para evitar contacto con los feligreses.

Mientras en la Diócesis de Nezahualcóyotl les entregaron la ceniza en bolsitas y con una oración para que se la colocaran en sus casas.

“¿Vas a llevar ceniza a tu casa, cuantas personas? Poquita ceniza en la cabeza, lo que sobre lo pones en una planta y esto es lo que hay que leer al principio”, preguntaron e instruyeron a feligreses.

En otras iglesias sólo les explicaron cómo hacer su propia ceniza.

“Vine a ver ahorita y está el anunció de que nosotros hagamos nuestra propia ceniza en la casa con las palmitas y nos pongamos la ceniza nosotras, por lo de la pandemia”, relató Ana María Miranda, feligrés de Valle de Chalco.

Sin embargo ello no impidió que miles de feligreses salieran a las calles a tomar ceniza.

En algunas parroquias, en municipios como Ecatzingo, afuera de lo que es la iglesia sólo se escuchaba por medio de altavoces una misa grabada.

En San Pedro Nexapa, en Amecameca, hubo misa grabada y los feligreses pudieron tomar ceniza por medio de las catequizadoras, quienes colocaban en esta ocasión la ceniza en la cabeza.

jcp