Sebastián Luri

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El futbol y sus alrededores

Ramos y la confianza

18 de Noviembre de 2020

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Donbass Arena, de Donetsk, en Ucrania, semifinal de la Eurocopa 2012 entre Portugal y España. Luego de un partido igualado, todo debió definirse desde los doce pasos. Entre los elegidos por Vicente del Bosque para ejecutar se encontraba Sergio Ramos, que venía de fallar groseramente, unas semanas antes, un penal decisivo que significó la eliminación del Real Madrid de la Champions ante el Bayern de Múnich. Ante la gran expectativa, el central la picó y concretó un gol que selló el pase a la final del torneo continental, en el cual España revalidó su título Europeo. En el país ibérico todo fue celebración y un reconocido periódico deportivo tituló: “La bendita locura de Ramos”. Todos eran elogios a su personalidad.

Hace unos días, en el St. Jakob Park de Basilea, Suiza, jornada 5 del Grupo 4 de la Liga A de la UEFA Nations League entre la Roja y los locales, al minuto 57 el portero Sommer le detuvo a Ramos una pena máxima que hubiese significado la igualada de España con todavía media hora por jugar. Al 79´, falta en el área y nueva oportunidad para el capitán. Intentó pinchar el balón y ejecutó mal, provocando una nueva parada del arquero helvético. El mismo medio que festejaba años atrás, sentenció: “La irresponsabilidad de Ramos”.

Los mismos creadores de la frase “hay que ganar como sea”, en estas circunstancias aplican: “En estos casos, el jugador debe patear a asegurar”. Aunque sea imposible de probar con hechos y estadísticas (que están tan de moda en estos tiempos), el significado de estos dos tópicos futboleros, algunos sin evidencia científica, determinan que para “ganar como sea” habría que defender con un bloqué bajo muy sólido esperando la oportunidad de asestar letales contragolpes que garantizaran la victoria y “asegurar los penales” es pegarle a la pelota con la potencia suficiente para arrancarle la cabeza al portero en caso de que osara poner algún tipo de oposición. Me pregunto. Si estas respuestas son tan claras, ¿por qué no se aplican siempre?

¿Tienen todos los equipos las mismas virtudes y deficiencias para volver una forma de jugar una receta imbatible? Cómo puede alguien, desde una redacción o un estudio de TV, manifestarse sobre cómo un futbolista debe resolver en una acción donde el éxito de su ejecución está directamente relacionado con la confianza de cada jugador.

Ramos sintió que golpear a lo Panenka era la mejor forma de convertir, lo hizo y salió mal. Como dijo El Negro Jefe (Obdulio Varela): “Los de afuera son de palo”.

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