En excelentes manos

El domingo se vivió uno de los momentos que marcarán la temporada de la NFL, con sólo nueve segundos y perdiendo por cuatro puntos ante Buffalo, Kyler Murray se escapó de la presión, lanzó un pase desesperado a la zona de anotación, ahí entre tres rivales, DeAndre Hopkins atrapó el pase de manera sensacional de entre las manos de sus rivales, para darle a Arizona una improbable victoria.

La jugada es una de tantas espectaculares que el quarterback de segundo año nos ha brindado desde que llegó a la liga tras su brillante último año en la Universidad de Oklahoma. Su capacidad para hacer cosas grandes, ya sea con sus pies o con su potente brazo, lo han colocado muy pronto entre los principales jugadores jóvenes de la NFL.

Pero Murray no es el único mariscal de campo con pocas temporadas en el profesionalismo que ya se encuentran en la lista de los más populares, carismáticos y ganadores que tiene el futbol americano. Él es parte de un grupo que tomará la estafeta de los veteranos que han marcado la pauta por años, y que, por obvias razones, con el paso del tiempo, que no perdona, están cada vez más cerca del retiro.

Aunque Tom Brady, Drew Brees, Ben Roethlisberger, Aaron Rodgers, Philip Rivers y Russell Wilson siguen jugando a gran nivel, la realidad es que su tiempo en el emparrillado se esfuma (especialmente el de los primeros cinco), y estas jóvenes estrellas que brillan junto a ellos ya les están empezando a robar algo de reflector.

El nuevo grupo, obviamente, está encabezado por el mejor en la posición durante las últimas tres campañas, el MVP del pasado Súper Tazón, Pat Mahomes, al que en este tiempo se le han unido, además del estrella de Arizona, otros que ya son líderes de sus franquicias: empezando por Lamar Jackson, de Baltimore, el reinante Más Valioso de la liga; así como Dak Prescott, de Dallas, quien iba rumbo a una histórica campaña antes de su lesión; Josh Allen, de Buffalo, que tiene un gran brazo y es una amenaza corriendo; Carson Wentz, que, a pesar de sus errores este 2020, ha tenido en su corta carrera momentos brillantes; Jared Goff, que ya guio a los Carneros al título de la NFC en 2018; y a ellos muy pronto podríamos agregar a los novatos Justin Herbert, de los Cargadores, y a Tua Tagovailoa, de Miami.

Esta nueva generación de quarterbacks es idónea para la forma en que se juega en la actualidad, con un mayor número de jugadas en las que se les pide correr o salir de la bolsa de protección para lanzar.

Es difícil ver a los grandes irse, aquellos que fueron el rostro de la liga por más de una década. Pero la NFL puede estar tranquila de que, cuando llegue el momento de que las leyendas se retiren, el presente y el futuro están en excelentes manos.

La ley de derechos de autor prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Excélsior sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.