Amigos y rivales

Entre las fotografías que circularon profusamente durante los JO de Roma en 1960, figura la del etíope Abebe Bikila cruzando el Arco de Constantino, y el oro en el maratón que conquistó corriendo con los pies descalzos por las calles de asfalto y adoquinado de la Ciudad Eterna; la imagen que conserva el tiempo de la grandiosa final de los 400 m planos en la que el estadunidense Ottis Davies y el alemán Karl Kauffman cruzan la meta con el récord mundial 44.9 con el oro para el primero por la diferencia en el registro electrónico 45.07 y 45.08, queda también grabada en la historia la figura de Rafer Johnson, hombre de raza negra de los Estados Unidos y el asiático Yang Chuan-kwang al terminar la exhaustiva prueba del decatlón.

Yang, nacido en la isla de Formosa, aparece ligeramente adelantado, con el cuerpo inclinado hacia su derecha. Sus ojos están entrecerrados y su brazo derecho parece colgarle. Del lado izquierdo, aparece Rafer Johnson, su cabeza negra y más negro su ensortijado pelo, se recarga en el hombro derecho de Yang. Da la impresión de que está a punto de desplomarse. Se conocieron e hicieron amigos en UCLA, Universidad de California en Los Ángeles. Yang había ido a conocer los Estados Unidos y le gustó tanto que, tras dos meses de vacaciones, decidió quedarse a vivir. Ambos practicaron con el entrenador Ducky Drake y la evolución del chino, quien era talentoso y muy disciplinado fue rápida. Rafer Johnson, nacido el 18 de agosto de 1935 en Hillsboro, Texas, era un corpulento atleta de 1.90 metros de estatura y 91 kilogramos de pesos. Debió conseguir su primer oro en los JO de Melbourne en 1956, pero una herida en su rodilla no le permitió alcanzar más de 7,587 puntos para el segundo lugar después de su compatriota Milton Campbell, 7,937, récord olímpico. El pasado miércoles falleció Rafer Johnson a la edad de 86 años. Y desfilan por la memoria varias de sus acontecimientos. En los Panamericanos de México 1955 ganó el oro en decatlón al superar al célebre monarca Bob Richards. En su cuarta competencia batió el récord mundial, que le fue arrebatado por el soviético Vassily Kusnetsov en Filadelfia, en 1958. Un año después fue a Moscú y recuperó la marca. Fue actor y una de la tres personas que desarmaron al asesino de Robert Kennedy, (al que conoció en 1960 y se hizo amigo) aquel 5 de junio de 1968 en LA. Encendió la antorcha en los JO de 1984.

En el libro de Wallechisnky y Loucky se refiere que antes de la prueba decisiva en Roma, los 400 m planos, Johnson y Yang hablaron con Drake. Él le dijo a Johnson: No te despegues de sus talones y ponte listo para “un sprint infernal”.  Ya Yang: Despégate de Rafer lo más que puedas y da todo en la última vuelta. Yang ganó los 400, pero Rafer llegó un segundo atrás y ganó el oro en decatlón.

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